Malestar por la leyenda de la placa instalada por el Ayuntamiento
- Hubo comentarios malhumorados. Críticas que, si bien no deslucieron el acto, mostraron una incomodidad que, con un poco más de dedicación, podría haberse evitado. Y todo por la inclusión de una palabra en la placa ,«huían», que por su exceso de asepsia hirió la sensibilidad de algunos de los congregados, que se quejaban de que La Desbandá no fue ninguna «huida»; en primer lugar porque, insistían, se trataba de población civil y no de forajidos, pero también porque las causas del movimiento no aparecen reseñadas: la llegada tumultuosa y a tiro limpio de las tropas de Franco y su ejécito de sublevados. La placa colocada en el Peñón del Cuervo por el Ayuntamiento el pasado sábado ha generado malestar entre las asociaciones de familiares, que declararon ayer a este periódico no entender por qué ningún responsable municipal les ha consultado para consensuar el texto que quedó finalmente grabado y en el que no se hace en ningún caso mención al origen de la diáspora ni a sus dramáticas circunstancias. «Bastaba con una llamada para ponernos de acuerdo y que la gente se sintiera más cómoda», señalaron ayer fuentes del colectivo a este periódico