ALFONSO VÁZQUEZ. MÁLAGA
Después de 13 años de demandas no escuchadas, la entidad urbanística de colaboración de Miraflores del Palo pasará a la acción, cortando a partir del 11 de enero el suministro de agua a 800 vecinos, la mitad de ellos, ajenos a la urbanización y residentes en El Palo a quienes este organismo también proporciona agua.
Fuentes de la entidad han explicado a La Opinión que con esta medida se persigue un doble objetivo: "En primer lugar que el Ayuntamiento recepcione un servicio que no tenemos por qué dar nosotros, porque el que una entidad de colaboración dé agua a la población no nos parece sensato y en segundo lugar, que deje de discriminar a unos 400 vecinos del Palo a quienes no da agua".
Con respecto al primer punto, fuentes de la entidad han recalcado que "una cosa es colaborar en el mantenimiento de jardines y otra encargarse del suministro del agua". Estas fuentes han recalcado que el Ayuntamiento hace "dejación de funciones" al permitir que unos particulares repartan el agua. De hecho, la urbanización es la encargada de comprar el agua a Emasa y luego la distribuye al mismo precio. Además, tiene que hacer frente a gastos administrativos y de mantenimiento de las instalaciones, una tarea que dura 24 horas al día.
En cuanto al suministro extra a 400 vecinos del Palo, fuentes de la entidad han destacado que Emasa "está quedándose con determinados clientes que le interesan como los de El Drago, mientras que a estos vecinos los discrimina porque son viviendas en las que hay que individualizar el suministro y eso cuesta más". La entidad urbanística de conservación ha declarado que que el Ayuntamiento sólo tiene que hacerse responsable de unas redes de distribución que están ya instaladas".
Vecinos de El Palo. Por su parte, Santiago González, presidente de la Asociación de Vecinos de Miraflores del Palo, ha resaltado: "Por un lado entendemos que Emasa debería hacerse cargo del agua de todo el mundo y que la entidad no quiera tener más esta responsabilidad, pero tendrá en igualdad de condiciones como el resto de los malagueños, entregando la urbanización en las mismas condiciones".
La Opinión de Málaga 26-12-06