Seamos sinceros: Málaga a vista de pájaro quita el hipo. La Ciudad del Paraíso desde los Montes de Málaga es lo más parecido a una concentración de bloques de pisos lanzados al aire y que han caído donde les ha venido en gana.
Esta colocación alocada no es producto exclusivo de los años 60 y 70. En nuestros días prosigue el lanzamiento de bloques, al que se han sumado las casas adosadas. Se trata de un secreto a voces que ningún responsable político quiere comentar para no frenar el motor económico de Andalucía, pero las evidencias están ahí y esta imagen caótica y atropellada será la que reciban las próximas generaciones de malagueños.
Pero no todo está perdido. El intento de que la capacidad de recaudación prime sobre la razón ha sido atajado con un informe de la Junta de Andalucía, que critica diez proyectos del futuro PGOU de Málaga.
La única manera de que los ayuntamientos, incluido el de Málaga, no presenten planteamientos urbanísticos disparatados (la trasnochada marina de Arraijanal o nuevas zonas masificadas) es transfiriéndoles competencias y capacidad de financiación, retirándoles la mayoría de las competencias urbanísticas.
En España ya estamos viendo la que se forma cuando los consistorios se meten a promotores de suelo. O comienzan a florecer manejos turbios o los ayuntamientos buscan el mayor aprovechamiento urbanístico posible, con la excusa de que nadie debe parar el crecimiento económico de una ciudad. Una pescadilla en toda regla.
El resultado: ciudades de pesadilla en uno de las zonas más castigadas de Europa por el exceso de `ladrilleo´. Los políticos malagueños necesitan un globo aerostático que no se limite a `sobrevolar´ las elecciones municipales. Un paseo semanal en globo les mostraría la ciudad que están levantando. A más de uno le daría un `repullo´ y eso que todavía no han llegado los rascacielos de Repsol ni los de Martiricos.
Las sillas
Ayer, hacia las 9 de la mañana, los alrededores de la plaza de toros presentaban un `lleno hasta la bandera´, con aficionados a la espera de comprar las entradas formando una larga cola. Los primeros de la fila aguardaban cómodamente sentados en sillas plegables.
Versos y prosa
Ya ha salido un nuevo número de la `revista de pensamiento y poesía a la espera de patrocinador que no sea el Estado´, `Versos con versos y prosa´, que dirige Enrique del Pino y que ofrece curiosidades como una disquisición apócrifa de Maquiavelo, muy veraz; versos rescatados de Altolaguirre; cuentos `especialmente escritos para leer en el metro de Málaga´ o reflexiones como: "Lo que embellece al desierto es que en alguna parte esconde un pozo de agua". Los interesados en la revista pueden escribir a enriquedelp@yahoo.es.
La chequera
Ayer martes, el 1,80 de estatura de un señor de unos sesenta años cayó sobre los adoquines redondos de la plaza del Carbón. El Ayuntamiento tendrá que preparar la chequera de las indemnizaciones, después de dar el visto bueno a la obra municipal más chapucera desde la `recuperación´ de la muralla nazarí de la calle Carretería.
Si a la Catedral se le permitió ponerle cemento al centenario suelo del patio de los Naranjos para evitar caídas, ¿no se podría hacer algo con estos adoquines recién puestos y que evocan un movimiento sísmico japonés?
LA OPINION DE MALAGA