10.500 jóvenes podrán optar a las nuevas ayudas para el alquiler de vivienda

MATUCHA GARCÍA. MÁLAGA Con el año 2008 arrancan las nuevas ayudas del Gobierno central para jóvenes destinadas al alquiler de una vivienda. Se estima que en la provincia se podrán beneficiar en torno a 10.500 malagueños.
El objetivo de esta medida impulsada por el Ejecutivo central es fomentar la emancipación de este sector de la población. Las ayudas están destinadas a los jóvenes de entre 22 y 30 años con ingresos inferiores a 22.000 euros brutos anuales -no cobrar más de 1.800 euros mensuales brutos- y suponen una ayuda directa de 210 euros cada mes.
Esta medida supondrá un desembolso en la provincia de las arcas del Estado de unos 12,3 millones, un importe que se elevará a los 13,1 millones si se añaden el aval y la fianza.
El mercado. A pesar de la desaceleración de la construcción de los últimos meses, los pisos siguen manteniendo un precio por encima de las posibilidades de los jóvenes malagueños. El alquiler se posiciona para muchos como la única salida posible para la independencia. El precio medio de alquiler de un piso de dos habitaciones en Málaga pasa por unos 500 euros al mes. Esta cifra aumenta de forma considerable en función del barrio donde se ubique el inmueble, los metros cuadrados del mismo y la antigüedad del edificio. El negocio puede proporcionar al casero una media a la baja de 6.000 euros de beneficio al año, según precios reales existentes en el mercado.
Según datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la provincia existen 434.723 viviendas, de las que 47.444 están arrendadas, lo que representa el 11% del total. Así en Andalucía existen 2.415.143 inmuebles de los que 222.002 son en alquiler, por lo que la media andaluza se sitúa en torno al 9%, estando Málaga dos puntos por encima.
Proceso. Las solicitudes para obtener esta nueva prestación del Gobierno se pueden entregar desde ayer 1 de enero de 2008. Además del importe del alquiler el joven puede solicitar una ayuda suplementaria de 120 euros para el pago del aval bancario asociado al contrato del alquiler y un préstamo de 600 euros para la fianza, sólo para los nuevos contratos y no para los ya existentes.
Este último préstamo deberá ser devuelto cuando finalice el contrato de alquiler o se deje de recibir la ayuda, cuyo tiempo máximo está establecido en cuatro años. Además, se debe presentar un contrato de trabajo de más de seis meses de antigüedad o de duración si se acaba de firmar, así como el contrato de arrendamiento.
Del mismo modo, de esta prestación se podrán beneficiar los autónomos, becarios de investigación y receptores de una prestación social pública de carácter periódico, contributiva o asistencial.
"Esta es una prestación que muchos jóvenes requieren para poder afrontar su propia vida. Para muchos de ellos el precio de los pisos es un obstáculo difícil de salvar para su emancipación", considera el diputado socialista Miguel Ángel Heredia.
En la provincia de Málaga se contabilizan 97.000 jóvenes que tienen entre 22 y 30 años y que están trabajando. Los beneficiarios podrán además solicitar el reconocimiento provisional del derecho a la renta básica de emancipación antes de arrendar una vivienda. La previsión es que unos 300.000 jóvenes españoles se acojan a esta prestación.