A. VÁZQUEZ / S. HAMUDI. MÁLAGA La chimenea de la antigua fundición de Los Guindos quedó ayer reinaugurada después de una rehabilitación ´de altura´ que casi la ha devuelto al estado de esplendor que tenía en 1923, cuando fue construida por el ingeniero y barón alemán Felix von Schlippenbach.
Con esta rehabilitación, a la que asistió el alcalde de Málaga, se cierra del todo una etapa ´oscura´ para la protección del patrimonio industrial malagueño, después del derribo consentido, en los últimos años, de dos antiguas chimeneas industriales y el cuestionamiento municipal de la pervivencia de la chimenea de la Térmica, finalmente conservada. La rehabilitación, a cargo de Hermanos Campano, ha saneado la fábrica de ladrillo, reparado fisuras, acristalado los accesos al interior de la chimenea e integrado este hito del patrimonio en el paseo marítimo.
Además, la estructura, que ha sido iluminada desde la base, está coronada por un pararrayos y también se ha instalado un sistema que indica la inclinación, para evitar nuevas ´torres de Pisa´.
La parte más alta de la chimenea, de 96 metros de altura, ha sido reconstruida. Con los años, la chimenea perdió altura, en total 15 metros, seis de ellos después de que Urbanismo la rebajara hace un par de años por el riesgo de derrumbe.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, acudió a este ´renacimiento´ de la chimenea acompañado por el concejal de Urbanismo Manuel Díaz; así como por representantes de colectivos vecinales y de la Asociación en Defensa de las Chimeneas y del Patrimonio Industrial de Málaga.
"Agradezco el trabajo que se ha realizado por recuperar este patrimonio industrial", destacó ayer De la Torre, mientras que José Antonio Ruiz, presidente de la Asociación en Defensa de las Chimeneas y del Patrimonio Industrial de Málaga, alabó que la lucha por la rehabilitación de esta infraestructura, que ha durado diez años, haya dado por fin resultados. Otro de los aspectos más ´notorios´ de la rehabilitación ha sido la eliminación de la gigantesca pintada de ´Mónica´, realizada por el joven José Carlos Selva en 1993 para reconciliarse con su novia, Mónica Vallejo. Las nuevas generaciones parecieron haber olvidado la historia de la fundición de Los Guindos y desde entonces comenzaron a llamar ´Mónica´ a la chimenea.
Por ello, el Ayuntamiento colocó ayer tres placas explicativas: la primera de ellas, sobre la historia de la chimenea, la fábrica y el barrio, a propuesta de la Asociación en Defensa de las Chimeneas y del Patrimonio Industrial de Málaga; la segunda, con los datos técnicos de la chimenea y la tercera, recordando la aventura de ´Mónica´.
El pasado mes de enero, aprovechando los últimos días de los andamios alrededor de la estructura, el alcalde de Málaga, el concejal de Urbanismo y un grupo de periodistas subió hasta lo alto de esta chimenea, similar a un rascacielos de 32 pisos. Media hora duró el ascenso que deparó unas vistas únicas de la nueva zona de expansión de Málaga.
La fábrica de la Compañía Minero Metalúrgica ´Los Guindos´ fue inaugurada en 1924 y en los años 50 llegó a contar con 300 trabajadores mientras que en la cercana finca de Santa Paula tenía una escuela de formación profesional para los hijos de los obreros. Cerró en 1979 por falta de demanda.
El nombre de ´Los Guindos´ proviene de unas minas en Jaén, propiedad de la compañía que fundó la fábrica en Málaga.
