153 muertos en el peor siniestro aéreo de los últimos 25 años

153 personas han muerto tras el accidente de un avión de Spanair (vuelo JK5022) con 172 personas a bordo y con dirección a la isla de Gran Canaria, según han confirmado a EL PAÍS fuentes de la compañía. La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, confirmó anoche estos datos cerca de las 23.00 horas, en lo que ya es el peor siniestro aéreo en 30 años. El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, aseguró que había "20 heridos ingresados en hospitales de la Comunidad, de los que han identificado a 16", varios de ellos en estado grave. (Consulta su evolución y el hospital en el que se encuentran). Uno de los heridos, un joven de alrededor de 25 años, moría cerca de las 22.00, con lo que quedan 19 supervivientes. La gravedad de algunos de ellos lleva a pensar que la lista de muertos irá en aumento. Teléfono de atención e información: 800 400 200.

Grafico

Tragedia en Barajas

GRAFICO – El Pais – 20-08-2008

– Guadalupe Cruz, Matías Cortina/PRISACOM

Audio

Sergio Allard Barroso: "El avión paso su revisión anual de mantenimiento"

AUDIO – Cadena Ser – 20-08-2008

El director comercial de Spanair anunció que, hasta la fecha, no se habían reportado averías en el avión

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Bomberos del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid buscan a dos desaparecidos, informó a Europa Press un portavoz de Emergencias Madrid. En torno a las 7.00 horas, los dos equipos de Bomberos han comenzado un último rastreo en el lugar del accidente para encontrar a estas dos personas y recoger pruebas para esclarecer los hechos. No obstante, albergan pocas esperanzas de encontrarles con vida. Según los últimos datos, el piloto, que ya ha sido identificado, presentaba fracturas en ambos brazos, lo que podría apuntar a que trató de frenar antes de que se estrellase el avión, informa Televisión Española.

Según Spanair, el aparato tenía un total de 172 personas a bordo: 162 pasajeros (incluidos dos niños) y 10 personas de la tripulación. La compañía ha colgado de su página web la lista de pasajeros, sin especificar quiénes de ellos han sobrevivido.

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, a la espera de los datos que aporten las cajas negras de la aeronave, explicó que el aparato, tras una primera aproximación a la pista de despegue, su regreso y la reparación de la incidencia, volvió a la pista para iniciar la maniobra, levantó el morro y las dos ruedas delanteras. Sin embargo, ha precisado que aún se está investigando si llegó a levantar las ruedas traseras. "El comandante en el momento en que iba a despegar pìdió una revisión, pero se le autorizó a seguir", ha explicado.

El accidente se produjo más o menos a un kilómetro de la Terminal 4, en la Pista 36, la más apartada y conocida como La Isla. El incendio provocado por el avión fue extinguido minutos después de las 17.00. El vuelo salió con una hora y media de retraso, posiblemente por problemas técnicos, extremo que aún no ha sido confirmado por la compañía ni por AENA. Se trataba de un vuelo de código compartido con el vuelo Lufthansa LH 255, del que iban siete pasajeros, cuatro de ellos alemanes, sin que se haya confirmado aún su estado.

El consulado sueco ha confirmado la presencia de dos ciudadanos de su país entre los pasajeros. Fuentes chilenas, por su parte, han confirmado la presencia de al menos un pasajero de esa nacionalidad. Por su parte, el embajador colombiano ha confirmado, que una herida de esa nacionalidad está ingresada en un hospital madrileño, según ha anunciado a Caracol Radio.

Identificación de los cadávares

Los cadáveres fueron trasladados al pabellón 6 de IFEMA, donde llegaron varios coches fúnebres. Las familias de las víctimas se han congregado en el recinto ferial, el mismo lugar donde llegaron en su momento los cádaveres de los muertos el 11-M. Allí estuvieron el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y de Sus Majestades los Reyes. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se desplazó tras salir del IFEMA junto al presidente, a los hospitales de La Paz y al Ramón y Cajal para interesarse por el estado de los heridos.

La identificación de todos los cadáveres llevará al menos dos o tres días más, hasta que se realicen los exámenes necesrios de ADN según ha confirmado la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien ha asegurado que a primeras horas de esta mañana eran 14 el número de cuerpos que habían sido ya reconocidos. "La circunstancia en la que están hace muy difícil la identificación", ha declarado en la Cadena Ser la titular de Fomento.

"Estaba todo lleno de cuerpos"

Abatido y con el rostro desencajado, un trabajador de AENA, testigo de los hechos, corroboraba ayer las dimensiones de la tragedia: "El avión estaba todo partido, todo estaba lleno de cuerpos", ha asegurado el hombre.

Según testigos presenciales, el motor izquierdo del avión empezó a arder poco después del despegue, informa Rafael Méndez. El aeropuerto de Barajas se reabrió al tráfico poco antes de las cinco de la tarde.

El avión y la compañía

Por su parte, Sergio Allar, director comercial de Spanair, fue escueto en sus explicaciones y aseguró en rueda de prensa en Madrid que la compañía no tiene "todavía ninguna información" y que "no podemos especular". "Es responsabilidad de aviación civil llevar a cabo la investigación y Spanair facilitará la información disponibles a aviación civil", informa Mokhtar Atitar.

El avión era un MD-82 fabricado por la firma McDonnell Douglas y que había pasado una revisión completa el pasado 24 de enero.

En el operativo desplegado intervinieron 230 sanitarios, 170 policías municipales, 70 bomberos del Ayuntamiento de Madrid y cerca de 45 ambulancias y se establecieron cuatro hospitales de campaña en el lugar del accidente.

El peor accidente de la historia se produjo el 27 de marzo de 1977 en el aeropuerto de Los Rodeos (Tenerife) donde fallecieron 583 personas al chocar dos aviones. En los últimos diez años han muerto 42 personas en accidentes aéreos. El último accidente más grave se produjo en Bilbao el 19 de febrero de 1985 y en el que murieron 148 personas.