Después de un trienio de congelación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), que debería haber venido creciendo paulatinamente desde 2009 por la revisión de los valores catastrales que se efectuó ese año, los malagueños notarán la subida en 2012. El alcalde, Francisco de la Torre, reconoció ayer que resulta «evidente» que habrá un aumento de la cuota de este impuesto para el próximo ejercicio presupuestario, aunque matizó que tratarán de «suavizarlo» mediante una reducción del tipo impositivo que se aplica al valor de la vivienda.
No obstante, desde el equipo de gobierno municipal no se arriesgan aún a hacer un pronóstico sobre cómo será esa temida subida, que supondrá repercutir en siete años el aumento de los valores catastrales que se produjo en 2009. La otra opción era repartir esa actualización de valores a lo largo de diez años, computando un 10% en cada ejercicio. Sin embargo, el Gobierno local optó por un sistema de bonificaciones que le ha permitido contener la subida del IBI en los últimos tres años, justo hasta el de las elecciones locales, que se celebrarán el próximo mayo.
El Consistorio ha dejado de ingresar por este motivo un total de 63,8 millones de euros desde 2009. Sin embargo, De la Torre aseguró que ese dinero no cobrado no se va a repercutir en los próximos siete años, ya que se procurará bajar el tipo del IBI para compensar el incremento de los valores catastrales. Con todo, reconoció que esa revisión del Catastro no es homogénea, por lo que puede haber sectores de la ciudad que se vean más perjudicados por la subida del impuesto que otros.
Para evitar esto, el único margen de maniobra del Ayuntamiento es rebajar el tipo impositivo, que ahora es de algo más del 0,6% y puede bajarse hasta el 0,4% como mucho. «Entre esas dos marcas hay margen para compensar la subida de los valores catastrales de las casas», apuntó el alcalde que, no obstante, señaló al mismo tiempo que la revisión de los valores catastrales se gestó en años anteriores a la crisis, con lo que algunas cantidades pueden estar sobredimensionadas respecto a la actualidad. «Pero hemos estado tres años sin aplicar subida alguna, ese ahorro para los ciudadanos ya es intocable, y yo no conozco ningún caso en España de una aplicación tan ambiciosa y tan global de la bonificación potestativa», recalcó.
Graduación
Además, De la Torre quiso lanzar un elemento tranquilizador a los malagueños al apuntar que podría graduarse la repercusión de la subida del Catastro en los próximos siete años. De repartirse por igual, ese incremento sería del 14% cada ejercicio. Sin embargo, el alcalde dio a entender que ese porcentaje puede ser algo más bajo en los primeros años, por «la dureza de la crisis económica».
Igualmente, el regidor explicó que aún es prematuro abordar la subida del IBI para el año que viene porque ello también va a depender del presupuesto de ingresos que se elabore para ese ejercicio, sobre todo en lo relativo a las transferencias que el Ayuntamiento recibe de otras administraciones como el Gobierno central y la Junta de Andalucía, unas fuentes de financiación públicas condicionadas por la crisis.
De la Torre participó ayer, junto a la concejala de Economía, Carolina España, y el gerente de Gestión Tributaria, Juan Manuel Ruiz Galdón, en la entrega de las ayudas al IBI del año pasado para colectivos desfavorecidos. Gracias a esas subvenciones, que en conjunto suman 733.000 euros , un total de 7.140 familias sólo han tenido que pagar la mitad del impuesto. Más de dos mil de esas familias se han beneficiado por ser numerosas
Fuente: Diario Sur.