Su presidenta, Inmaculada de la Torre, insiste en la necesidad de «retomar el plan de mejora integral de la barriada aprobado en 2010, a fin de transformar un lugar «no apto para mayores». Su opinión es secundada por decenas de vecinos que reclaman el arreglo urgente del acerado, cableado y entradas accesibles a viviendas con más de 40 años.
Sin modernizar
«La Pelusa se ha hecho mayor y mientras unas zonas se modernizan aquí no avanzamos, sólo se ponen parches en las calles, cuando se aprobó un plan integral que transforme el entorno más deteriorado», reclama Juan Rodríguez.
Este vecino afirma que las escalinatas y las calles empinadas hacen que un simple paseo se convierta en una carrera de obstáculos para cualquier mayor, algo que se ha visto empeorado con las nuevas edificaciones y el crecimiento del tráfico en el barrio.
«Muchas familias han asumido sus propias rampas porque los mayores tienen derecho a salir a la calle y las soluciones municipales se están haciendo de rogar», afirma Rodríguez, tras reconocer el arreglo de la calle Algarrobo y la reposición de algunas rampas en mal estado.
Los residentes creen que ha llegado el momento de actuar en La Pelusa, aunque consideran injusto culpar únicamente al equipo de gobierno. «El barrio se construyó hace cuatro décadas y desde entonces no ha sido mejorado. Lo importante es que las soluciones lleguen pronto», pidieron los portavoces.
fuente: Diario Sur.