Los trabajos para acondicionar el nuevo carril reservado para bicis entre la curva del Morlaco y los Baños del Carmen se encuentran al 70% de ejecución y la previsión es que pueda quedar abierto la próxima semana. Aunque en realidad la traza, de 800 metros y que se ha hecho a expensas de eliminar una vía para el tráfico, ya está siendo ocupada los fines de semana por los ciclistas, cuando no hay máquinas por medio. En los próximos días se va a incorporar la señalización y los separadores de goma, para evitar que los coches lo ocupen. Se trata, según explicó ayer el concejal de Movilidad, Raúl López, de un tramo del futuro carril que irá desde La Malagueta hasta el final de El Palo, incluido en el Plan Andaluz de la Bicicleta, que impulsa la Consejería de Fomento. «Ese trozo preocupaba por cuestiones de seguridad vial y se acordó ejecutarlo ya, para que esté a disposición de los ciclistas en verano», dijo López, quien reconoció que se debía haber hecho antes, aunque solo ha sido posible tras asumir el Ayuntamiento varias carreteras que eran competencia del Estado. Tendrá un coste de 80.000 euros. La cifra 800 metros es la extensión de este tramo, desde la curva del Morlaco hasta los Baños del Carmen, que era el principal punto negro de la red viaria para los ciclistas, por lo que se consideraba urgente solucionarlo. ¿En qué consisten las obras?Se ha delimitado un carril exclusivo para las bicicletas, adosado al paseo marítimo, para evitar riesgos en la curva del Morlaco. ¿Cómo afecta?Se ha eliminado uno de los tres carriles de tráfico que había en sentido Este. ¿Hasta dónde llegará? Después de verano se prolongará por los dos extremos, hacia el Centro y hacia El Palo, gracias a un convenio con la Consejería de Fomento, que impulsa el Plan Andaluz de la Bicicleta. La ampliación se producirá previsiblemente tras el verano, una vez que se firme el convenio entre el Ayuntamiento y la Junta que despejará las inversiones para nuevos carriles bici en la ciudad. También está sujeto a este hito el diseño del proyecto, para determinar los itinerarios definitivos, con la participación de los distritos y de los vecinos. «Pero ese trozo lo teníamos claro, es una demanda que muchos ciudadanos nos habían trasladado infinidad de veces». En cuanto al tráfico, el edil aseguró que no se está produciendo ninguna incidencia fuera de las habituales; aunque pidió que de cara al verano, cuando aumenta la circulación en la zona, se utilicen las rondas para cruzar la ciudad. «Esa zona se va a convertir en una calle más urbana». Tampoco los residentes de la zona han mostrado reparos por ahora, mientras que el respaldo es total por parte de los colectivos ciclistas. Hasta que el carril conecte por ambos extremos, los usuarios podrán elegir entre seguir por el paseo marítimo o por la calzada, sobre todo en la calle Bolivia, donde la acera es más estrecha e incómoda