Resulta que en la capital del Reino, en el Madrid endeudado hasta la desvergüenza, cerca de los 7.000 millones de euros por pagar, precisamente por la mala gestión de sus dirigentes gobernantes, la cuenta de tanta culposa y culpable incompetencia que habrá de ser saldada. . . ¿por quienes?: pues por los paganos de siempre, por los desgraciados de costumbre, que tienen tan poco que perder que sabrán desprenderse de eso que apenas poseen . . .que será tan fácil como desalmado quitárselo. . . aunque eso quizás no preocupe demasiado a las autoridades municipales.
Y así, desde las cabezas regidoras y pensantes del Ayuntamiento de la capital, se han puesto a la faena.
Y así han comenzado sin contemplaciones, todo dentro de la más estricta legalidad, a, por ejemplo y con calculadísima premeditación, vender a empresas de “fondos buitre” viviendas de protección oficial. . . para sacar dinero, vil metal y cochambroso papel.
Esas viviendas que habían sido sorteadas, alquiladas, con posibilidad factible de ser compradas por gente, familias, madrileñas y madrileños de precaria economía, ofrecidas como bienes sociales, y que mejor o peor iban satisfaciendo el precepto constitucional del derecho a la vivienda, y que estaban y están ocupadas por estas sencillas personas. . .pero que han sido vendidas, a traición, a hurtadillas, solapadamente, sin avisar a los confiados inquilinos. . . sin haberles avisado de tal tropelía.
Que por eso y al fin se enteran de que el propietario de sus viviendas alquiladas ya no es el Ayuntamiento de Madrid, que antes bien al contrario ahora una empresa inclemente e implacable es la nueva “ama” de su vivienda, una propietaria cruel que les “sube abruptamente” el alquiler hasta la asfixia, multiplicando por las veces que haga falta. . .hasta provocar que la vivienda quede libre. . .para el mercado libre, para su explotación más provechosa, a cambio de un desahucio “cantado” para los inquilinos que ahora mismo sufren una tragedia insuperable, sin posibilidades de superarla, con su familias acongojadas, con la pena anclada en los corazones y almas de quienes confiaron. . .en su Ayuntamiento que, sencillamente, les ha traicionado.
Y el negocio entonces es redondo, para el Ayuntamiento y para la empresa de fondos buitres. Y entretanto a los inquilinos en precario. . .pues que “se jodan y que vayan ahuecando”. . .sin que la ciudadanía se rebele y todo pueda suceder. . .mientras “callamos y otorgamos”. . . porque, por ejemplo, nos está atacando “una alferecía de apolítica resignación”. . . y que arre el que venga detrás.
Pero este atropello después de todo no es “terrorismo” porque somos tan ilusos que nos creemos que ¿no nos produce suficiente terror?. Pues por eso.
Torre del Mar enero – 2.015