Es la segunda vez en toda su historia que El Palo compite en dicha categoría, tras quedar entre los 16 mejores de España hace cuatro temporadas. Daniel Agudo es el entrenador de esta generación exitosa, la nacida en el 2002, que intentará dar la sorpresa ante equipos más punteros.
"La idea que tenemos es hacer un buen campeonato. Estamos muy contentos porque en Andalucía hemos dado una buena imagen jugando. En el Nacional, quedemos como quedemos, lo que queremos es que la imagen que demos sea la que hemos demostrado este último año", contó el técnico a este periódico.
Agudo se llevará a las trece jugadoras a Galicia. Candela, Sofía, Carmen Ramírez, Laura, Carmela, Ale Murillo, Carmen Ramos, María, Beatriz, Lucía, Blanca Berrocal y Ale López intentarán en la pista dejar el pabellón malagueño lo mejor posible, mientras que Blanca Adel, lesionada, estará cerca de sus compañeras. "El premio para las chicas es la semana que están allí de convivencia, con jugadoras de un nivel muy alto y conociendo a gente de otras provincias, así como el sentirse un poco profesional. Esa convivencia es la que se llevan las chicas, más allá de las medalles", afirmó el técnico paleño.
Agudo tendrá en Galicia a siete jugadoras que han estado en la selección malagueña. Sin embargo, cree que la fortaleza de su equipo no reside en una jugadora, sino "en el equipo en sí". "Todas tienen un nivel muy parejo. Un día no está una y te aparece otra. Es complicado de defender, porque si tienes dos buenas te puedes centrar contra ellas pero si tienes un equipo donde todas tiran y penetran, es más difícil de defender", añadió.
El conjunto malagueño seguirá los pasos del CB Salliver Fuengirola y del Andalucía Promesas, los dos clubes de la provincia que han participado en el Nacional femenino, en categoría junior y cadete, respectivamente. El Palo hará el triplete representando a la provincia, que ha cuajado un gran año en la pista. Las marengas inaugurarán el torneo el primer día al enfrentarse ante el subcampeón del País Vasco. El lunes les tocará jugar ante el campeón de Castilla y León, el Uva Ponce, para cerrar la primera fase ante el Spar Gran Canaria, subcampeona de las Islas Canarias. Para pasar a octavos, el cuadro malagueño debe quedar entre las tres primeras, en un formato que ha cambiado en esta edición.
Agudo confiesa que ir al Campeonato de España "no era un objetivo, sino un premio. El objetivo, a nivel deportivo, era ir al Andaluz y allí disfrutar al máximo". Lo consiguieron hace unas semanas, algo que, para el técnico malagueño, "ha venido muy bien para rebajar la euforia".
Las malagueñas llegan a Galicia tras haber perdido las dos finales, tanto en Málaga como en Andalucía, pero con la moral reforzada por cómo se produjeron. "Ganarle un partido a Promesas fue una liberación porque desde pequeñas esa generación siempre nos había ganado", asegura Agudo, que cifra la derrota en el Campeonato de Andalucía por "la falta de tensión tras clasificarnos. Tenemos que aprender a ser ambiciosas y no porque hayamos conseguido un objetivo tengamos que conformarnos con eso. Fue el partido menos bueno que jugamos y aun así, el valor de este equipo, es que estuvimos hasta los últimos segundos para ganar. Espero que esa final nos sirva para motivarnos. Es lo que intento transmitirle a las chicas".
A pesar de no ser favoritas, El Palo quiere llegar lo más lejos posible. "No pensamos desde el club que tenga que ser el objetivo final porque puede traer frustración, no puedes valorar si se trabaja bien o mal por un resultado. Pero sí es bonito que tengan una ambición deportiva".
Agudo afirma estar muy contento con sus jugadoras, no sólo en el plano deportivo, también en el escolar. Las chicas tienen que hacer los exámenes una semana antes que sus compañeros para poder ir al Nacional, algo que algunos padres no llegan a entender. "Es un grupo con muy buenas estudiantes, pero es cierto que quizás se tendría que tener en cuenta este tipo de cosas. Una semana más tarde vendría mejor", confiesa el entrenador.
