30/12/08. Cultura. El concejal malagueño de Izquierda Unida Pedro Moreno Brenes ha aprovechado la calma chicha que reina estos días en las instituciones malagueñas (semiabandonadas, Junta, Diputación y Ayuntamiento dormían ayer la pax vacacional navideña) para insistir mediante un comunicado en la línea básica de su mensaje de oposición: el alcalde le oculta las cuentas instituciones culturales públicas como el Teatro Cervantes, el CAC, la Fundación Picasso o la Capitalidad Cultural 2016, que se han convertido en entidades “envueltas en la opacidad y ajenas a los controles y a cualquier principio de un poder público”, según el escrito llegado a EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com.
LAvalía política del concejal Moreno Brenes no proviene de su oratoria, su talante conciliador o su carisma sino de que es -él mismo lo reconoce- muy pesado (él se califica como “perseverante”). Su tesón y sus conocimientos legales -profesor de Derecho Administrativo en la Universidad de Málaga- hacen que vuelva una y otra vez sobre el asunto que sostiene la columna central de su tarea de oposición: las cuentas públicas de la cosa cultural malagueña y su sospechosa falta de control.
particular por exigir la información contable que se le niega. A fuerza de notas, comunicados y ruedas de prensa el edil está sembrando dudas razonables sobre los motivos que llevan a la administración del PP a no facilitar estos muy esperados datos. 
e administración y no han pasado por ninguno”. Como ejemplo “de la ineficacia e improvisación que se está produciendo en la gestión de la Fundación Picasso”, Brenes recuerda que el catálogo “de la obra gráfica del centro no ha podido distribuirse al no autorizarlo la familia por la mala calidad de las reproducciones pese a que la Fundación pagó 28.970 euros por su edición”. Además, apunta a que en la Fundación “se están dando algunos casos y situaciones nada edificantes como presiones sobre el personal y advertencias del régimen disciplinario al que están sometido sus empleados”. 
municipal de Izquierda Unida lamentó que se haya adjudicado su gestión “a una empresa privada que tiene una sentencia en contra en otra comunidad autónoma por resolución de contrato”, en alusión a la sociedad dirigida por Fernando Francés, Gestión Cultural y Comunicación, a la que como desveló en exclusiva EL OBSERVADOR el Gobierno cántabro le retiró un contrato de tres millones y medio de euros por incumplimiento culpable de sus obligaciones.
ELúltimo requerimiento del concejal estuvo referido a la campaña Málaga 2016 sobre la que inquirió acerca de dos de sus principales apuestas museísticas. Así Brenes calificó de “tomadura de pelo” que se destinen 29 millones de euros para exponer “colecciones privadas” de gemas y vehículos en el edificio de Tabacalera, tal y como prevén los planes de De la Torre.