Según ese convenio, firmado en febrero, los administradores de fincas tienen hasta diciembre para cuantificar la relación de habitantes de cada inmueble. Cuando se firmó el convenio había unos 2.300 bloques de vivienda sin actualizar su padrón. Actualmente quedan aproximadamente, según datos de una y otra parte, unos 1.500 bloques que tienen hasta diciembre para actualizar el número de habitantes de cada vivienda. Quiere decir que el 45% de los bloques deberán esperar hasta el año próximo o meses anteriores para que sus recibos se actualicen con la nueva tarifa de Emasa desde noviembre pasado. Significa que en torno a 64.000 abonados de Emasa no podrán incorporarse a la nueva facturación hasta el año próximo.
La razón es «la enorme complejidad» que supone poner al día la relación de habitantes de cada vivienda, según explicó el presidente del colegio de Administradores de Fincas de Málaga, Fernando Pastor, que aludió también a que hay administradores que gestionan la comunidad de muchas viviendas, «por lo que necesitan un tiempo adecuado para realizar el trabajo con rigor y profesionalidad».
El edil de Medio Ambiente y responsable de Emasa, Raúl Jiménez, señaló que conforme se vaya actualizando su censo los bloques se incorporarán al nuevo sistema tarifario. Mientras tanto se aplica la fórmula más favorable para los vecinos. Se divide el consumo total por los 133 litros por habitante y día, que da como resultado un número de inquilinos ficticio y más beneficioso para la comunidad