Chaves y De la Torre acercan posturas y se comprometen a impulsar la construcción de VPO

«Esta reunión positiva debe marcar las relaciones entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga en los próximos meses y años». Son palabras del presidente autonómico, Manuel Chaves, tras finalizar el encuentro que mantuvo ayer con el alcalde de la capital, Francisco de la Torre, con motivo de su visita a la Feria de Málaga. La reunión entre ambos responsables políticos estuvo marcada por un tono de cordialidad que ocultó por unos momentos las discrepancias que mantienen las administraciones local y regional en diferentes materias. Ayer tocó aunar voluntades para desarrollar los proyectos pendientes, entre ellos, la construcción de viviendas de protección oficial, para lo que anunciaron la firma en el próximo otoño de un convenio que contribuya a impulsar la realización de este tipo de casas.

Manuel Chaves recordó que Málaga es una de las ciudades con una mayor demanda de viviendas a precios asequibles, «por lo que tenemos que ponernos de acuerdo y plasmarlo en un convenio», afirmó. En ese sentido, indicó que ese acuerdo debe reflejar qué suelos van a servir para la realización de VPO en los próximos años y plasmar el compromiso tanto del Ayuntamiento y la Junta como de los promotores privados, a los que corresponde desarrollar como viviendas protegidas el 30% de los sectores que se aprueben en los nuevos planes urbanísticos de los municipios andaluces.

Aprobación del PGOU

El deseo de potenciar cuanto antes la construcción de pisos protegidos en Málaga llevó al presidente de la Junta a mostrarse partidario de aprobar «rápidamente», según declaró, el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Málaga, del que el alcalde destacó que el 40% de las nuevas viviendas que contempla -unas 14.000- son de VPO. «Tenemos que ponernos en marcha cuanto antes y vamos a intentar que el PGOU esté aprobado lo más rápidamente posible», aseguró Chaves.

No obstante, existen informes de diferentes departamentos del Gobierno andaluz que van en contra de algunos de los planteamientos del nuevo PGOU de la capital y que pueden demorar su aprobación varios meses aún.

En ese sentido, Francisco de la Torre dijo que el calendario que pudiera establecerse en el nuevo convenio de VPO «tendría interrogantes», ya que el Plan General no ha sido aprobado aún de manera provisional. No obstante, el regidor apoyó el convenio con la Junta y apostó por el acuerdo con ésta para acelerar los trámites que permitan la realización de un total de 3.649 pisos protegidos, que están pendientes de informes de la Administración andaluza para poder desarrollarse. La mayor parte de estos -2.580, en concreto- se alzarán en una zona situada al norte de Soliva, en Puerto de la Torre. El resto (1.069) irán en la futura urbanización de Sánchez-Blanca, junto a Intelhorce. Como ya adelantó este periódico (ver SUR 12/4/2007), la Empresa Pública del Suelo de Andalucía promoverá la mayor parte de ese millar de VPO.

Además, en la reunión hubo un principio de acuerdo para que el Consistorio asuma la rehabilitación de los bloques de viviendas de protección oficial de la ciudad.

Por otro lado, Chaves anunció que los técnicos de la Junta y del Ayuntamiento se reunirán tras las vacaciones para analizar qué proyectos de los 50 que ha presentado el Consistorio se incluyen finalmente en la petición de fondos Feder a la Unión Europea. «Habrá que determinar cuáles son prioritarios y cuáles se adaptan al programa Feder, porque no todos se adaptan», aclaró Chaves.

Polígonos

Al respecto, De la Torre indicó que puede ser difícil recabar fondos de la UE para el arreglo de los polígonos industriales, como se había previsto. No obstante, el presidente de la Junta se mostró dispuesto a contribuir en la mejora de estas zonas, pese a no haberlo hecho antes en otras ciudades andaluzas, según puntualizó, si también intervienen el Ayuntamiento y los propios empresarios. El alcalde agregó que la ayuda del Gobierno andaluz podría ser decisiva para la mejora de la carretera Azucarera-Intelhorce.