En manos de los leguleyos que saben ajustarse al espíritu de la letra. En nombre de la legalidad aunque contradiga la ley del tiempo y la realidad de la calle. Por el propio espíritu de la claridad mental, del refrendo imprescindible a un Estado que base su razón de ser en el voto directo de sus ciudadanos. . . y sin embargo lo haya soslayado. Avisando de la Gran Coalición que se entrevé, entre tantas razones sin razones de «los padres de la patria», desde sus estrados, para que no se mueva mucho el invento de «su poder compartido». Con el miedo metido en el cuerpo ante las fuerzas fácticas y todopoderosas. Para seguir levantando el morro de la supervivencia tan cara y tan contra corriente. En una democracia anquilosada y sujeta al procedimiento. Cueste lo que cueste el mismo, para que cada quien ocupe su puesto al sol y frente . . . al plasma, ahora que se juega «el Mundial», . . . y partimos como favoritos. Con las glosas al margen, naturalmente, absorbidas perfectamente por el procedimiento que todo lo podrá y nada esclarecerá, en el merengue orquestado por las fuerzas vivas del bipartidismo sempiterno. Ahora resulta que la CEOE, y a quién puede sorprender, pretende otra vuelta de tuerca más, con la sugerencia de que el «despido debería ser más libre y gratuito», más de lo que es ahora, con un periodo de prueba y posibilidad de despido ipso facto y sin justificar a los doce meses. Mientras nada sucede en las alturas del procedimiento. . . ante la inminente proclamación del «estado actual de cosas», y a ras de suelo el deterioro en la situación de los trabajadores que empeora día a día. Mientras se niega la evidencia, y ahora que los trabajadores deberán aceptar sueldos de hambre, con el miedo metido en el cuerpo, serviles hasta la necesidad de «esperar» que puedan no ser despedidos . . . cuando acabe el año, porque lo único que les aguarda es el «ninguneo» de su condición de «trabajadores» intercambiables. Y así, sin rechistar, sujetos al procedimiento, con una mayoría de la sociedad trabajadora de nuestro país en situación de injusta precariedad, a merced de los empresarios, tan admirados, con sus dirigentes, por cierto, en la picota del choriceo más ruin y solapado, creyéndose en el derecho de seguir quedándose con el magro de cuanto puedan rapiñar. En tanto el procedimiento evita el debate, la declaración de principios, sustituido todo ello por la aplicación exhaustiva del espíritu de la letra, mientras interese a las clases dirigentes. . . acobardadas ante el avance de las fuerzas que apuntan . . . como «improcedentes». Con el procedimiento correcto como inevitable y soez coartada de que hay que «aguantar» como sea. Con el tactismo perfecto de las agrupaciones políticas más poderosas muy pendientes de que no se les escape el chollo de su poder reunido alrededor de millones de votos, para atrincherarse tras la estela de los «intereses creados» para salvaguardar a los «centinelas del poder» vigilando el orden establecido . . .»por la cuenta que nos venga encima». Para que terminen «retratados» en el Parlamento andaluz, con los diputados votando por Monarquía o República, aunque de lo que «pretenden» hablar es de democracia «ad hoc». . . o democracia a tumba abierta. Torre del Mar 19 junio 2.014
E L P R O C E D I M I E N T O
- Publicación de la entrada:22/06/2014
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