Ana Zamora fue de las primeras en lanzarse a la orilla. Apenas llevaba cinco minutos despierta cuando comprobó el calor que hacía en la calle y levantó el teléfono para avisar a sus amigas. «Hay que prepararse para el verano y ponerse morena cuanto antes», bromeaba. Como esta joven estudiante, las personas que van a pasar todo el puente de vacaciones se encuentran de enhorabuena, ya que la meteorología se mantendrá inalterable hasta el miércoles. Hoy, incluso, las temperaturas máximas -ayer se situaron en los 26 ºC- registrarán una suave subida.
A pesar del aumento de los termómetros, pocos bañistas se atrevieron a probar el agua. La mayoría se conformó con tomar el sol por primera vez esta temporada. Y es que a la frialdad del mar característica en esta época del año se le unió la bandera amarilla que ondeaba en la capital. Al menos, el suave viento que corría en la orilla impidió que los usuarios necesitaran un baño urgente.
Quienes más agradecieron el buen comienzo del puente fueron los responsables de los chiringuitos ubicados en los diferentes paseos marítimos, que registraron una elevada afluencia de visitantes. En algunos de ellos, sobre todo en los ubicados en Huelin y Torremolinos, no escondieron su satisfacción por las buenas ventas alcanzadas y las previsiones para el resto de los días festivos.
A uno de estos restaurantes acudió Daniel Santos con su familia, que llevaba varios días con ganas de sol. «En jornadas así da gusto salir a comer a la calle con todos los seres queridos», expresó.