El consumo de agua se eleva al triple en el inicio de agosto por la afluencia de turistas

LUCAS MARTÍN. MÁLAGA No todos los indicadores turísticos tienen que ver con el ritual de las maletas y la entrada en el Aeropuerto. Algunos muestran sus efectos en el consumo de recursos, que se multiplica en temporada alta. Quizá uno de los más inesperados es el gasto en agua, que ha comenzado agosto con una tónica radicalmente distinta a la exhibida en julio. En apenas diez días, las reservas de los pantanos han perdido 10,03 hectómetros cúbicos, lo que de mantenerse en el resto del mes, supondría el triple del promedio habitual de la provincia.
La cifra presume el gasto de un hectómetro cúbico al día. Una cantidad bastante elevada si se tiene en cuenta que el consumo anual de Málaga suele rondar los 120, pero que tiene su explicación en la afluencia masiva de turistas. Hasta hace tan sólo unos días, la demanda, aunque disparada respecto al resto del año, se situaba en valores inferiores a los del pasado verano, lo que únicamente deja sitio a dos conjeturas. O los malagueños se han olvidado repentinamente de cerrar el grifo o se ha recibido a un número mayor de viajeros.
Durante los primeros diez días de agosto de 2009, se contabilizó un gasto ligeramente inferior, 9,88 hectómetros. La subida anticipa el salto en la entrada de turistas, sobre todo si se advierten las cifras del balance más cercano, correspondiente a julio. Málaga utilizó durante el mes un total de 23,68 hectómetros almacenados en los embalses, tres menos que durante el mismo periodo del pasado año, lo que permite inferir un incremento de la demanda a buen seguro relacionado con la industria del turismo. «Si al final se confirma el aumento de agosto se deberá, sin duda, al crecimiento de turistas al que aluden las previsiones», señala Remedios Martel, delegada provincial de Medio Ambiente.
A pesar de la presión demográfica y su incidencia en el consumo, más de 33 hectómetros en apenas cuarenta días, los pantanos se mantienen en niveles todavía bastante generosos, especialmente si se cotejan con las cifras de temporadas anteriores. La cantidad de agua que acumulan supera los 546 hectómetros, los que los sitúa al 88,95 por ciento de su caudal. Un volumen que rebasa ampliamente la estadística de 2009, en la que el porcentaje de llenado no llegaba a la mitad.
Aun así la provincia ha consumido 50,42 hectómetros en lo que lleva transcurrido de temporada alta, que arrancó con los pantanos al 94,4 por ciento. Unos números que, por esta vez, no comprometen el abastecimiento, garantizado por la abundancia de las lluvias del pasado invierno.
El gasto, salvo en los últimos diez días, refleja una moderación que tiene su correlato en el balance de la capital, que cerró julio con el lector de consumo en 4.578.143 metros cúbicos, 120.000 menos que en 2009, de acuerdo con las cifras de la Delegación de Medio Ambiente

Fuente: Diario La Opinión de Málaga