EL FORO

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A punto de írseles la mano en el estrangulamiento y vaciado de los parias que llegaron a creerse otra cosa, que ahora toca plegar el velamen y soltar algo de “pitas, pitas”, sin pasarse, poquito a poco, que lo augura el Fondo monetario internacional, ¡otros que tal bailan!, con una prospectiva de crecimiento para nuestro país, ¡en cueros!, de hasta el 0,6%, es decir nada o casi nada, que siempre es algo más que cero patatero, y más contentos que unas pascuas, con el empleo en precario y súper temporal, con los sueldos por los suelos, naturalmente los más bajos, y con la liquidación del currante al gusto del empresario, con el optimismo pues bobalicón en ciernes de hacérnoslo tragar, ¡también!, por incrédulos o por todo lo contrario, por crédulos, que ellos ya se encargarán de repetirnos el mensaje. . .hasta la náusea, esbirros de sus amos, ¡dueños de los dineros y las riquezas mangoneando sobre sus testaferros, preclaros e insaciables!

            Porque aquí se trata de sobrevalorar la macroeconomía, ¡natural!, y que de paso arrastre, a su paso, al tran tran, sin mayores prisas, la microeconomía. . .porque está demostrado que la resistencia de los pobres a la inanición inducida es sobresaliente,. .  .claro que sin pasarse, claro que con ese vaivén que nos lleve y nos traiga, ¿por quienes?, por los mismos, en su mimetismo y adaptabilidad insuperables, como artífices del expolio y como redentores en la recuperación, mientras el “optimismo” oficial corre ríos de tinta trampuchera y perversa, sobrevolando la precariedad como un logro inigualable, como si lo que importara, ¡ y mira que lo repiten!, es alegrarse con una miseria antes que con nada.

            Pues en esas estamos, atentos a los malabarismos del Foro Mundial de la Economía, con nuestros insignes representantes, la alcaldesa de Madrid, el ídem de Barcelona y el ministro de Industria, como representantes de nuestro, ¡contritos los quiere dios!, empavorecido país, ¡a gastos pagados!, como pavos reales, engolados y soberbios, para que dejen el pabellón patrio por todo lo alto del inane vasallaje ante los más poderosos, por si acaso pierden comba, cancha y réditos, tan felices, que ya están conformados los discursos, de lo bien que nos va y de lo que nos va a ir, a poco que nos conformemos con un zurullo de casi nada.

            Porque de esa se trata de cuadrar la impunidad y encauzar la codicia, bajo tintes de “economía de mercado libre”, por la que se sustenta el enriquecimiento de los poderosos, hábiles en producir dinero que regrese siempre a sus bolsillos, mientras se engaña al personal con migajas que corren a consumir, hasta el empobrecimiento, para volver a empezar, para volver a quedarse sin nada, así en un bucle infinito y letal, en una filosofía consumista, timorata e insolidaria, que enriquezca hasta la obscenidad . . . a los guardianes de la “recuperación bajo control”, mientras zozobra la inmensa mayoría de la población terráquea y en Davos vuelvan a “inventarse todos los cuentos que nos han contado tantas y tantas veces”, esos cuentos de los que huía y sobre los que nos advertía el poeta León Felipe, esos cuentos que les dan de comer, esos cuentos con que nos burlan, burlando . . .

            Y entre ellos se lo guisarán y comerán, y como también dice el refranero, ¡reunión de pastores oveja muerta!, y entretanto el personal “formal y civilizado”, con sus protestas bajo el brazo de la modosidad, según directrices del poder político, casi sin molestar, para que no nos hagan ni “puto caso”, y se demonice y sancione a modo cuanta salida de pata y pedrusco al cristal financiero se produzca.

            Mientras continúan los desahucios, el hambre recorre los estómagos infantiles de demasiados niños, la precariedad es una gracia que nos conceden y los barandas del “desastre y la recuperación”. .  .al unísono se mirarán el ombligo en Davos.

            Y todos tan felices y agradecidos por la cuenta que nos van preparando, mientras las listas de espera aumentan y la educación muestra rotos y a los Erasmus se les recorta el tiempo de ocho meses a cinco por “inutilidad manifiesta” de la formación, ¡para qué!, si ya están los ínclitos personajes del corralillo español velando. .  .por sus intereses. . . y de paso también. . . por los de los suyos, a tanto la matrícula de quienes puedan costeársela..

            Y así va la cosa de la “recuperación” como un trágala insoportable y mentiroso, al paso de la lenta agonía de una o más generaciones perdidas en el sumidero de la desesperación, . .  .mientras se discute sobre el sexo de los ángeles y las bondades de las economía “floreciente”, mientras se humilla por enésima vez a las mujeres con una propuesta de ley sobre la regulación del aborto realmente aborrecible, en tanto el nuevo príncipe de la iglesia, el señor Sebastián anda empeñado en “normalizar” a los homosexuales. . .mal que les pese a los patriarcas misóginos por evitar el contagio “mariconil”.

            ¡Pues muy bien! que se reúnan y que nos digan lo que les dicten que seguirán habiendo quienes les crean.

            Torre del Mar 26 – enero – 2.014