La tradicional competición una de las mas antiguas y longevas de España. Este año serán 11 cuadrillas las que participarán.
Cuando la disputa cumplió medio siglo, homenajearon su historia en una exposición en calle Alcazabilla. Manuel Peláez, ha anunciado que podrá se admirada de nuevo el próximo domingo en las inmediaciones de la Plaza del Padre Ciganda
El certamen consiste en una competición entre cuadrillas (con un máximo de 35) integradas por un oficial de albañil y un ayudante o peón. Todas ejecutarán simultáneamente el mismo trabajo de albañilería. Aquella que demuestre su superioridad tanto en conocimientos técnicos como en destreza obtendrá el primer premio y las cuadrillas que en sus piezas alcancen también cotas de perfección recibirán diferentes galardones.
La Comisión Organizadora elegirá el tipo de construcción a realizar, una pieza de fábrica de ladrillos que deberá ejecutarse en un periodo de 4 horas y en cuya ejecución exista alguna operación de replanteo y trazado. Los materiales a utilizar serán suministrados por la organización y realizarán la construcción de la pieza dentro de un espacio acotado y adjudicado previamente a cada una de las cuadrillas. Los concursantes deberán acudir provistos de las herramientas propias del oficio, quedando terminantemente prohibido aquellos materiales ajenos a los facilitados.
El jurado calificador está compuesto, además de la Comisión Organizadora del Concurso, por arquitectos, aparejadores, arquitectos técnicos, constructores y el oficial ganador de la pasada edición 2017. Uno de estos técnicos representa al Colegio de Arquitectos y otro al Colegio de Aparejadores.