Recuerdo que cuando estudiaba el bachillerato, el fraile que impartía matemáticas tenía una metodología muy curiosa. Resultaba que empleaba el palo, literalmente, una vara dura y de madera de fresno bien curada, para departir su asignatura. Y así preguntaba, vara en ristre, preguntas, cuestiones, problemas . . . logrando que la mayoría contestara "que no sabía nada", a cambio de un "palazo", sólo un palazo, hasta que, "los más adelantados y listos en la asignatura" intentaban contestar, . . .a cambio de "un palazo detrás de otro". Naturalmente esos compañeros llegaron muy lejos, en los despachos de bancos, en consejos de asesoría y administración . . . tan meritorios desde su más tierna adolescencia, mientras el resto pasábamos del reto . . . rindiéndonos antes de tiempo, antes del varazo.
Resulta que llamado el anterior gobernador del Banco de España ante el juez, por razón e imputación de no haber activado las alarmas ante la entrada de Bankia en Bolsa, incluso tras haber recibido numerosos informes de los inspectores del Banco de España que avisaban de lo "que se les venía encima", vía desastre como llegó a suceder.
El exgobernador ha declarado al respecto que efectivamente : "él no había leído esos informes y además no tenía obligación de leerlos", y así y que rule el desdén y el sobreseimiento de las responsabilidades pasadas por el forro, como de costumbre.
En otro orden resulta que ahora van desgranando ante el gran público conversaciones telefónicas, íntimas y personales, del rey emérito, de hace 20 años, como parece ser efecto de regüeldo retardado desde "las cloacas del Estado", de los anteriores gobiernos y de los actuales, hasta que la infamia y la hipocresía vaya tapando todo lo de decente que pueda intentar sobrevivir. Un rey putero, ardiente y muy amoroso, y unos comisarios "a lo loco, a lo loco" hozando desde el lodazal de sus cloacas.
¡Valiente panorama! . . . indecente, trincón y chapucero, en una ciénaga donde han convivido ranas y sapos, culebras y caimanes, devorándose y metabolizándose sin parar . . .en la ciénaga nacional en que han convertido a "¿su querida patria?".
Torre del Mar marzo – 2.017