FALLECE EL GRAN CANTAOR CLÁSICO ALEJANDRO SEGOVIA CAMACHO «CANELA DE SAN ROQUE»

El Salón de Plenos del Palacio de los Gobernadores acogerá a partir de las 13.00 horas de hoy su capilla ardiente, y la Misa se llevará a cabo mañana miércoles en la Parroquia de Santa María La Coronada, tras lo que se procederá a su entierro en el Cementerio de San Miguel.

 
El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha mostrado sus “condolencias a su familia y amigos en mi nombre, en el de toda la Corporación y del pueblo de San Roque. Hoy ha muerto un grande del flamenco”.
 
El primer edil ha señalado que “Canela de San Roque paseó con su arte el nombre del municipio por todo el mundo, logrando la admiración de los aficionados al flamenco. Su fallecimiento supone un gran revés para la cultura sanroqueña, y es justo que desde el Ayuntamiento le rindamos el tributo que se merece mediante la capilla ardiente en el Palacio de los Gobernadores”.
 
“Todas las personas que lo deseen -añadió- podrán así dar el último homenaje a esta gran figura del cante, y también el pésame a sus familiares y amigos. Aprovecho la ocasión para mostrar también mis condolencias de manera pública, un pesar que trasladaré más tarde a su familia”.
 
 
Familia de Perico Montoya
Alejandro Segovia Camacho nació en San Roque en 1947, pariente de Perico Montoya y los Jarrito. Fue un cantaor ortodoxo y enciclopédico, su predilección por los cantes de Antonio Mairena, Perrate, Juan Talega, fue notable como se aprecia en sus soleares, siguiriyas, soleá por bulería, y bulerías. Asimismo cultiva con frecuencia los fandangos del Chato Méndez, Antonio de la Calzá y los fandangos caracoleros, los tientos de Rafael el Tuerto y las viejas cantiñas de Cádiz, Sanlúcar y Utrera.
 
Así como por tarantos, cartageneras, tangos, malagueñas del Mellizo y por tonás. No es un cantaor imitador, su cante tiene su sello personal y no se parece a nadie, aunque si se aprecian las matizaciones de los grandes fenómenos y maestros del buen cante, esto quiere decir que tiene vivencias y escuela.
Canela de San Roque perteneció a una generación de grandes artistas a los que les ha tocado vivir el flamenco de una forma distinta a la actual.
 
Canela ha desplegado una intensa trayectoria artística que le ha permitido llevar el nombre de su tierra más allá de nuestras fronteras. Dominó todos los palos y en su madurez artística ya era considerado un reconocido maestro de la soleá.
 
Grabó su primer disco a mediados de los ochenta de la mano de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, que se propuso registrar las voces de diversos cantaores de la comarca. A este trabajo discográfico siguieron otros y una imparable carrera flamenca, acompañada siempre del reconocimiento de los aficionados más exigentes y que tuvo uno de sus colofones en la reciente Bienal de Sevilla