Los bajos instintos pueden y deben ser muy rentables, por el enardecimiento imprescindible de la masa, de los unos contra los otros, de nosotros contra ellos, de los nuestros contra . . . “quienes no se lo merecen” . . . por la xenofobia que se abre paso . . . a favor de los bajos instintos, en aras de “la limpieza” imprescindible que consiga echar, expulsar, excluir . . .”con odio, con miedo”, desde la superioridad interpuesta contra el escalafón de los miserables que osan venir a compartir nuestro imperio, nuestro primer mundo . . . muy venido a menos.
Los bajos instintos que diferencian sin duda los buenos contra los malos, desde la mala saña hecha verbo encendido, rastrero, odioso . . . contra la víctima elegida, en nombre de la insolidaridad que, sal cabo arrastrará . . .a los malos y a los buenos que vayan cayendo en la desgracia de su “escasa valía”.
Porque los bajos instintos valoran el odio disfrazado de discurso altisonante, y el miedo mimetizado de razón inasequible . . .contra los parias que llenan nuestras calles de un espectáculo negado por los “puros” del odio y el miedo . . . hasta acabar con quienes nos sobran.
Los bajos instintos en el ideario de los miserables que no cejarán en fomentar el enfrentamiento, a favor de la exclusión al limbo de la invisibilidad y la insolidaridad más inhumana.
Los bajos instintos guarecidos a favor de la gente que teme perder su pobre estatus, que odia compartir, que detesta sencillamente la aplicación del derecho humano y fraternal.
Los bajos instintos fomentando el aniquilamiento de los otros, a favor de los unos. . . aunque mi vecino compatriota sea un miserable y desahogado corrupto . . .y el otro ya haya sido señalado por “el odio y el miedo” antes incluso de haber arribado al territorio de la esperanza . . .asesinada por la ideología nauseabunda que se alimenta de los bajos instintos de quienes odian,. De quienes temen . . .
Y en otro orden cabe destacar que el actual gobierno municipal de la capital del reino, exactamente del ayuntamiento de Madrid, ha decidido paralizar la venta a fondos buitres de 2.086 viviendas sociales, paralizando de ese modo el desahucio muy inminente a al menos 200 ocupantes de esas viviendas.
Y es que hay años luz entre unos gobiernos y otros aunque el ataque, en este caso, al gobierno municipal de Madrid, haya sido despiadado, desde el segundo cero, atacando cada intento de “empezar a gobernar” . . . como para que con los aciertos y errores consustancial es a toda obra humana la diferencia entre unos y otros sea abismal, aunque algunos se empeñen en dejarse acunar y arañar votos por el odio y el miedo.
Torre del Mar julio – 2.015