La apertura de la segunda ronda se adelanta al día 27, y la autopista, al 28

Las dos carreteras que están llamadas a solucionar el problema de los atascos en los accesos a la capital y la Costa del Sol llegarán finalmente un poco antes de lo previsto. La fecha tope estipulada por el Ministerio de Fomento para la puesta en servicio de la segunda fase de la hiperronda y de la autopista de Las Pedrizas (AP-46) era el 31 de octubre. En cambio, los dos últimos tramos de la nueva circunvalación se adelantan al 27, y un día después se podrá circular por la AP-46, según ha podido saber este periódico de fuentes cercanas a ambos proyectos.
Ambas infraestructuras están terminadas, a falta de los últimos remates de la señalización y el asfaltado, y no se podrán inaugurar oficialmente, a causa de la proximidad a las elecciones generales del 20-N. Con todo, el próximo domingo está previsto que José Blanco acuda a visitar la nueva circunvalación, aunque en calidad de vicesecretario general del PSOE y no de Ministro de Fomento.
Las fechas no son casuales, y responden a la cercanía con el puente festivo de Todos los Santos (31 de octubre y 1 de noviembre), y que será un momento con alta afluencia de viajeros en las carreteras malagueñas, en los que se pondrá a prueba la eficacia de los nuevos accesos.
La primera en llegar, tras cinco años de obras (aunque la mitad lleva un año abierta), será la segunda fase de la nueva ronda de circunvalación oeste de la ciudad, cuyos cuatro tramos han tenido un coste conjunto de 339 millones de euros. El impulso del Ministerio de Fomento permitirá que además del tramo que está operativo desde hace casi un año -entre La Virreina y el entronque con la autovía del Guadalhorce- ahora se pueda circular hacia o desde Torremolinos, por los dos tramos que se abren al público, y que también facilitarán el acceso a núcleos del área metropolitana como Alhaurín de la Torre y la barriada de Churriana. La autovía, cuyo uso es completamente gratuito, tiene 21,3 kilómetros, que se recorren de extremo a extremo en unos doce minutos y sin apenas riesgo de caravanas, puesto que la mayor parte del recorrido consta de cuatro carriles por cada sentido.
El tramo 1, que va desde el enlace del palacio de congresos de Torremolinos hasta Alhaurín de la Torre, tiene su hito principal en el doble túnel que atraviesa la sierra de Churriana, con cuatro carriles por sentido y 1.250 metros de longitud. A su vez, el tramo 2 de esta carretera -desde Alhaurín de la Torre hasta la autovía del Guadalhorce- tiene como estructura principal un doble viaducto sobre el río Guadalhorce, de 840 metros y que también dispone de cuatro vías en cada dirección.
Las Pedrizas, en 15 minutos
Al día siguiente verá la luz la autopista AP-46, con la que se podrá viajar desde el Alto de Las Pedrizas hasta la ciudad en solo 15 minutos (menos de la mitad de lo que se tarda ahora). Tiene una extensión total de 25 kilómetros y un trazado con curvas y pendientes muy suaves, merced a la construcción de 18 viaductos y tres túneles. Aunque el arranque de los trabajos se produjo en 2007, realmente se ha tardado cuatro en ejecutarla, puesto que las obras estuvieron prácticamente bloqueadas durante un año por dificultades financieras. Ha costado 400 millones.
Tendrá un único punto de peaje, en las inmediaciones de Casabermeja, aunque el coste definitivo está a la espera de la aprobación definitiva del Ministerio de Fomento y se conocerá en los próximos días. En cualquier caso, será de algo más de dos euros en temporada baja, y estará por encima de los tres euros en verano (de junio a septiembre) y Semana Santa
 
Fuente: Diario Sur.