La Araña, una visión a largo plazo

El regalo para Málaga que supone la Cueva de las Estegamitas nos recuerda que hay proyectos muy estimulantes para la zona como el de La Tela de Araña

Alfonso Vázquez

 

Este diario adelantó ayer una de las noticias más bonitas y esperanzadoras de los últimos tiempos: la Junta de Andalucía se compromete a proteger el patrimonio geológico de la Cueva de las Estegamitas, en la cantera de la fábrica de la cemento de La Araña.

Era lo lógico, habida cuenta de todos los pronunciamientos científicos desde que fue examinada en 2022 por un equipo de la Universidad de Málaga, el Instituto Geológico y Minero de España- CSIC y el Grupo de Exploraciones Subterráneas de la Sociedad Excursionista de Málaga. Ahora, la Universidad de Granada ha reiterado lo ya señalado por el equipo investigador de Málaga.

Su importancia geológica, habrá que subrayarlo, es mundial y por tanto supera en interés a la Cueva de Nerja.

Con este sensacional descubrimiento para Málaga y su provincia, quizás sería el momento de ponerse a pensar, cuando menos a largo plazo, con vistas siquiera a la segunda mitad de este siglo.

Porque en esta zona limítrofe con el Rincón de la Victoria se concentra ya un patrimonio geológico y arqueológico absolutamente excepcional, con una cueva que es única en el mundo y con un complejo arqueológico, el Bien de Interés Cultural de las cuevas de la Araña, que hace muchos años que es la envidia -expresada por el propio arqueólogo en estos lares- de Juan Luis Arsuaga, aunque esté semiabandonada por nuestras administraciones. Y como guinda en el entorno, el arco conmemorativo del antiguo Camino de Vélez, del siglo XVIII y la torre de las Palomas del siglo XVI.

En suma, son tantos los tesoros concentrados en este espacio y otros destruidos en su día por las obras de las carreteras circundantes y la propia actividad de la cantera, que a lo mejor ya es hora de plantearse seriamente, para la segunda mitad de este siglo XXI cuando menos, el traslado de la fábrica de cemento a un entorno menos valioso para la provincia y que no le suponga merma económica en su actividad.

Habrá que recordar que en 2022, este diario dio a conocer el proyecto Tela de Araña, una propuesta del productor Manuel Navarro, apoyada por el exministro Manuel Pimentel, catedráticos de universidad, ingenieros y arqueólogos, de transformar La Araña y su entorno -desde el Puerto del Candado al arroyo Totalán– en una gran zona verde, campus de investigación y área de protección arqueológica, previo traslado de la fábrica y la autovía. Sería, comparaba Manuel Navarro, una transformación similar a la de Bilbao y su ría. ¿No es para pensárselo con calma?