La Cátedra de Flamencología de la UMA se estrena con un homenaje a los clásicos malagueños

Creada el pasado mes de marzo, la Cátedra de Flamencología se presenta en sociedad con este homenaje a los clásicos en el que se combinarán charlas teóricas con recitales de cada uno de los cantes característicos del cante jondo malagueño.

Gonzalo Rojo, como ponente, Antonio de Canilla, como cantaor y Andrés Cansino, como guitarrista, estrenarán este ciclo el próximo 8 de mayo a las 20:00 horas, en una velada que girará en torno a “Los cantes de Juan Breva”. Miguel López Castro será el encargado el día 15 de introducir con su oratoria y con su cante el homenaje a “El Piyayo”, acompañado de la guitarra de Gabriel Cabrera.

El 22 de mayo Ramón Soler hará las veces de ponente en la noche dedicada a “Los cantes de La Repompa de Málaga”, cuya memoria estará acompañada por el cante de Amparo Heredia Reyes, “La Repompilla”, y el toque de Rubén Lara. Por último, la figura de “La Trini” cerrará el ciclo-homenaje el 29 de mayo, con Francis Bonela, al cante, Pepe Fernández, al toque y Pepe Luque Navajas como ponente.

Flamenco Cartel y Lona

Conferencias, coloquios y otras actividades

Maribel Calero es la directora de esta Cátedra de Flamencología que la UMA puso en marcha el pasado 12 de marzo con el apoyo de entidades públicas y privadas, como la Fundación Cruzcampo, como una apuesta por  por mantener, investigar y difundir el arte flamenco. La iniciativa contempla la organización de conferencias, coloquios y otras actividades educativas, culturales o científicas de interés común en torno al arte flamenco entendido como manifestación de la cultura popular.

Precisamente Jorge Paradela, director de Relaciones Institucionales de Heineken España, recordó durante el acto de presentación que “el arte flamenco ocupa un lugar destacado en los ámbitos de actuación de la Fundación Cruzcampo en Andalucía”.

Por su parte, la rectora de la universidad recordó que la relación de la UMA con el flamenco se remonta al año 1978 y definió los tres objetivos que se pretendían alcanzar desde la cátedra: fomentar el interés de los universitarios por el flamenco, impulsar la investigación de los palos y la historia y trasladar al medio social más próximo todo lo que vayamos investigando