La demanda para hacer ejercicio físico se dispara entre las personas mayores

El ejercicio físico no tiene edad. Hacerlo repercute beneficiosamente en el organismo a cualquier edad. Los ancianos son más conscientes cada vez de que practicar algún deporte de forma moderada les va a hacer sentirse más sanos o, en el caso de la natación, les viene muy bien para algunas dolencias que sufren. El número de personas mayores que han dado el paso adelante y se han puesto a hacer ejercicio físico se ha disparado en los últimos años. La demanda de los polideportivos y piscinas municipales ha crecido notablemente. Las actividades acuáticas son las más solicitadas.

El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Málaga, Elías Bendodo, explicó a este periódico que la petición de plazas en las instalaciones deportivas municipales por parte de ciudadanos de la tercera edad «es tremenda». El edil añadió que esa demanda va en aumento. «Disponemos de casi 3.000 plazas dedicadas a las personas mayores, de las que 2.130 son para mejorar y favorecer la condición física y 720 son de actividades acuáticas en las dos piscinas que tenemos en los polideportivos de la Trinidad y El Torcal», señaló Bendodo.

En el crecimiento progresivo del deseo de hacer deporte a edades más avanzadas han influido varios factores. Por un lado, los consejos y recomendaciones que los médicos dan a sus pacientes con más de 60 años respecto a que caminar, hacer gimnasia de mantenimiento o nadar son unos hábitos que tonifican y permiten llevar una vida más saludable. Junto a esto, hay que tener en cuenta que hay muchas personas mayores que se encuentran en perfectas condiciones y no quieren dejar de practicar actividades que venían haciendo desde mucho años antes, sin olvidar que existe una mayor concienciación de que la tercera edad no es sinónimo de invalidez ni de no realizar ejercicio físico.

Actividades en gimnasios

Todo ello hace que en los gimnasios malagueños se vea con frecuencia a personas de edad avanzada practicando actividades acordes a su capacidad y resistencia, fundamentalmente gimnasia de mantenimiento, caminar y natación. Bajo la supervisión de un monitor, los mayores se ejercitan y potencian su estado físico.

Expertos consultados indicaron que lo mejor es llevar a cabo unas sesiones diarias de 10 ó 15 minutos de duración, que pueden practicarse tanto en el propio domicilio como en un centro especializado. Los ejercicios es conveniente que los supervise un monitor. Realizar esa actividad mantiene y mejora la resistencia, la fuerza, la velocidad, la agilidad y la flexibilidad.

Los expertos señalan que antes de iniciar la práctica de cualquier deporte es necesario conocer el estado físico y las aspiraciones de la persona en cuestión. Lo indicado en esos casos es consultar a un médico o un profesional de la salud especializado en esos temas para que marque qué ejercicios son los más acordes a la edad, condición física y preferencias personales. El deporte en las personas mayores debe estar controlado por un monitor para evitar posibles riesgos, sobre todo si hace mucho tiempo que no se efectúan ejercicios físicos.

Relaciones sociales

Los polideportivos municipales y los gimnasios privados no sólo sirven para hacer deporte, sino que también favorecen las relaciones sociales entre las personas mayores, que hacen amigos a la vez que mejoran su estado físico.

En el caso del Ayuntamiento de Málaga, las casi 3.000 plazas que ofrece a los integrantes de la tercera edad se distribuyen entre una decena de instalaciones: los polideportivos de Ciudad Jardín, Tiro de Pichón, La Mosca, la Trinidad y El Torcal, los centros de mayores de El Palo, Gamarra y Montes de Oca, la Ciudad Deportiva de Carranque y el pabellón de El Palo.

Casi todos los ayuntamientos de la provincia cuentan con programa destinados a que los ancianos hagan ejercicio físico en pabellones y centros deportivos. Las plazas que se ofrecen se ocupan con facilidad.