La situación de irregularidad por la que atraviesan los chiringuitos del litoral de la provincia es mayoritaria. De hecho, siete de cada diez no tienen los permisos en regla. Así se puso ayer de manifiesto tras la reunión del Foro de Encuentro por el Litoral en la sede de la Subdelegación del Gobierno. El jefe de la Demarcación de Costas, Francisco Javier Hermoso, explicó que, de los 300 chiringuitos que existen en las playas de toda la provincia, un 25% tienen su concesión caducada y un 50% necesitan regularizar la autorización que recibieron sólo para un año y con la que siguen abiertos. Por ello, sólo la cuarta parte tienen vigentes concesiones otorgadas por una orden ministerial.
Hermoso indicó que la intención de Costas es estudiar caso por caso la situación de los chiringuitos con el fin de adecuarlos a la legislación vigente, aunque con flexibilidad. «He mantenido ya unas treinta reuniones con ayuntamientos costeros y hemos avanzado bastante en este sentido», precisó el responsable de la demarcación, quien reconoció que, en función de que cumplan o no las normas en materia de dimensiones y distancias, habrá que modificar o trasladar algunos de estos establecimientos.
Requisitos
Desde 2004, el Ministerio de Medio Ambiente se niega a renovar las concesiones administrativas si no reúnen una serie de requisitos, como limitar su superficie a 150 metros cuadrados, ubicarse en el paseo marítimo (en vez de en la arena) y mantener una distancia entre negocio de 200 metros lineales.
El subdelegado del Gobierno, Hilario López Luna, informó de que, en el encuentro de ayer, se dio luz verde a un decálogo de premisas para estudiar la situación de los chiringuitos que, según anunció, trasladará a la Dirección General de Costas. Entre estas propuestas figura la de interpretar la normativa con «criterios no restrictivos, con flexibilidad y sentido común», precisó. «Se trata de dar una seguridad jurídica al sector teniendo en cuenta la naturaleza de este tipo de negocios y procurando mantener sus puestos de trabajo», agregó López Luna. Según comentó, el sector de las playas ocupa a 1.500 empresarios y 20.000 empleados en toda la provincia.
A la convocatoria de este foro, que volverá a reunirse, asistieron los delegados de Turismo, Medio Ambiente, Obras Públicas y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, representantes de los empresarios de chiringuitos, del Patronato de Turismo y de los ayuntamientos de Málaga, Benalmádena, Mijas, Manilva, Torrox, Fuengirola y Rincón de la Victoria. Fuente: Diario Sur