La calle que hoy visitamos, sin embargo, se debió a estos últimos casi con toda seguridad. Se encuentra junto al centro de salud del Palo, en una calle dedicada al compositor y crítico musical madrileño Julio Gómez.
Lo llamativo de esta vía, con una parcela que se usa como aparcamiento y que la Asociación de Vecinos del Palo propuso en 2015 que albergara una piscina cubierta con parking, es que hay plantada una larga hilera de Ginkgo biloba, el famoso árbol chino, también muy presente en Japón.
Como si fueran los días azules recordados por Antonio Machado en sus últimos versos, los Ginkgo biloba de la calle Julio Gómez, en El Palo, se recortan en el cielo azul de Málaga, con los tonos amarillos y dorados de sus exóticas hojas en forma de abanico. El ginkgo, un árbol destinado para jardines botánicos y públicos de Málaga, ha ido popularizándose y ya se encuentra como árbol ´urbano’ en rincones de nuestra ciudad como este.