Ante la pasividad que parece mostrar buena parte del empresariado de la zona, el área de Promoción Empresarial opta por apretar las tuercas. ¿Cómo? La concejala Ana Navarro, actual responsable del departamento, deja claro que antes del próximo mes de julio se pondrá en marcha "una labor de inspección especial" con el fin de comprobar in situ si los hosteleros cumplen o no las normativas municipales. De comprobarse un comportamiento contrario a lo marcado en el plan de aprovechamiento o en la ordenanza de vía pública, el siguiente paso será la remisión de apercibimientos y la retirada de las mesas y sillas en aquellos casos en los que se acumulan varias notificaciones.
"Se actuará antes de julio con la retirada de sillas y mesas", sentenció la edil del PP, que destacó que desde el Consistorio se da posibilidades a los empresarios para regularidad la situación de sus terrazas. Una de las preocupaciones principales del equipo de Promoción Empresarial es el de que se liberen las plazas y rotondas existentes en ambos paseos marítimos, espacio que tradicionalmente aprovechan los hosteleros para ampliar sus terrazas. Hay que recordar que el exceso de ocupación detectado en los paseos marítimos de Pedregalejo y El Palo motivó en 2012 la remisión de 122 apercibimientos.
Y eso es algo que prohibe expresamente el plan de aprovechamiento de El Palo y Pedregalejo, documento que, todo sea dicho, flexibiliza las limitaciones incluidas en la ordenanza de ocupación de vía pública. El texto obliga, además, a mantener libre de mesas un mínimo de 2,8 metros del paseo, con el fin de facilitar el tránsito de los peatones. Conforme a las previsiones municipales, hay casos en los que los empresarios se van a ver obligados a retirar parte de las terrazas de las que ahora disponen, mientras que en otros tendrán la opción a ponerlas o ampliarlas. Y en los supuesto en que la acera no alcance si quiera los mencionados 2,8 metros, los locales no podrán disponer de terraza.
La nueva norma presta atención especial a la situación del paseo de El Palo, que en buena parte de su recorrido segrega la fachada de los bares y restaurantes de la zona peatonal por una calzada abierta al tráfico. En este caso, se autoriza a los comerciantes que lo soliciten la posibilidad de poner mesas entre los alcorques de los árboles. Este plan de aprovechamiento, que da continuidad a lo ya hecho en varios puntos del centro histórico y de Teatinos, fija la posibilidad de que los locales dispongan terrazas no sólo en el ancho de sus fachadas, sino también en la de los inmuebles anexos siempre que cuenten con la autorización de los propietarios del mismo.
La medida contó en su momento con el aval de los empresarios, que avalaron el beneficio que supone para ellos saber dónde se puede y dónde no una terraza. Algo que, según indicaron, redunda en positivo sobre sus previsiones de contratación, por ejemplo.
Navarro dijo no entender la pasividad mostrada por los empresarios y admitió que da la impresión de que sólo actúan conforme a lo que se les reclama cuando "se toman medidas por parte del Ayuntamiento". Ejemplo de ello, apuntó, es lo ocurrido en las últimas semanas en la calle Strachan, en el centro, donde se retiraron mesas y sillas de dos locales a los que se habían remitido numerosas advertencias por sobrepasar el espacio autorizado. "Antes no se podía pasar y ahora que hemos actuado se está cumpliendo la ordenanza", explicó la concejala.
Frente a las dudas expresadas por la edil sobre el número de establecimientos adheridos, el presidente de la Asociación de Hosteleros de Málaga (Aehma), Rafael Prado, valoró la cifra. "Es bastante importante", dijo, destacando que entre los que han dado ya el paso se encuentran los más señeros de ambos paseos marítimos. Lo normal, a su juicio, es que "den ejemplo, por lo que los demás quedarán arrastrados, tendrán que subirse al carro o les tendrán que aplicar la ley, que es más restrictiva".