En mayo, las organizaciones judías celebrarán el 60 Aniversario de la fundación del Estado de Israel. Este hecho es comprensible dentro del contexto de siglos de persecución que culminan en el Holocausto. Sin embargo, nosotros somos judíos que no lo celebraremos. Sin duda es ahora el momento de admitir el discurso del otro, el precio pagado por otro pueblo a causa del antisemitismo europeo y las políticas genocidas de Hitler. Como destacó Edward Said, el Holocausto es para los judíos lo que el Nakba es para el pueblo palestino.
En abril de 1948, el mismo mes de la masacre de Deir Yassin y el mortal ataque sobre la población palestina en la plaza del mercado de Haifa, se puso en marcha el Plan Dalet. Éste autorizaba la destrucción de las aldeas palestinas y la expulsión de la población indígena fuera de las fronteras del estado. Nosotros no lo celebraremos.
En julio de 1948, 70.000 personas palestinas fueron expulsadas de sus hogares en Lydda y Ramleh, bajo el calor del verano, sin agua ni alimentos. Cientos murieron. El hecho es conocido como la Marcha de la Muerte. Nosotros no lo celebraremos.
En total, 750.000 palestinos se convirtieron en refugiados. Unas 400 aldeas fueron borradas del mapa. No acabó aquí la limpieza étnica. Miles de personas palestinas (con ciudadanía israelí) fueron expulsadas de Galilea en 1956. Y muchos miles más cuando Israel ocupó Cisjordania y Gaza. Según la Ley Internacional y la Resolución 194 de la ONU , la población refugiada a causa de la guerra tiene el derecho a retornar o a ser compensada. Israel jamás aceptó este derecho. Nosotros no lo celebraremos.
No podemos celebrar el nacimiento de un estado fundado en el terrorismo, las masacres y el desposeimiento de otro pueblo de su tierra. No podemos celebrar el nacimiento de un estado que incluso ahora se dedica a la limpieza étnica, viola la ley internacional, impone monstruosos castigos colectivos a la población civil de Gaza y continúa negando a la población palestina sus derechos humanos y sus aspiraciones nacionales.
Nosotros lo celebraremos cuando árabes y judíos vivan como iguales en un Oriente Medio en paz.
Seymour Alexander
Ruth Appleton
Steve Arloff
Rica Bird
Jo Bird
Cllr Jonathan Bloch
Ilse Boas