NOCTURNO
Sobre el asfalto descarnado
y gris,
tintinean las sombras
quedas,
y alumbran los charcos
su esquivo reflejo,
al pie de la gravilla,
bajo la luna enmohecida
de silencio y plata,
bajo la negrura almidonada,
de luces y siluetas,
huyendo, al paso,
bajo el ritmo acelerado,
alejándose del confín estremecido,
de geometría urbana,
de soledad agrietada,
amortiguada la mirada
que enciende la noche,
tras la umbría que avanza,
aterida y mortecina,
desde el cobijo macilento
de unos cartones humedecidos,
desde la pasión estragada de lo que fue
y ya solo es un recuerdo desvaído
y ajado,
tras la derrota envilecida
de ilusión rota
y perdida para siempre,
al trasluz de la noche
en la ciudad. . .
que calla y trasciende . . .
al fin. . . vencida. . .
mientras haya quien deba buscar
pasar la noche, a resguardo,
a la intemperie . . .
de su desdicha y olvido.
Torre del Mar 17 – marzo – 2.014