Repitiendo hasta la introspección traspasada al común de los foros que han de escuchar y aplaudir, sin reservas, para ir despejando las dudas contra el adversario, contra la muchedumbre reacia, contra el competidor impertinente.
Desde sus limitadas ideas. Es fundamental que el orate no defienda ideas propias. Es muy arriesgado. Siguiendo la estrategia sobrevenida de arriba, creída y asumida sin reservas, persiguiendo el efecto reclutador.
Sin tomarse un respiro, acorazándose en su círculo de confianza, sin necesidad de la autocrítica y mucho menos del paso atrás.
Porque solo saben repetir el mantra tan sencillo. Incluso en la caída libre hacia el abismo, fruto del empecinamiento por la lección bien aprendida.
Convertidos en referentes infumables e incontestables.
Sin querer aceptar la realidad y el conteo de la derrota sin paliativos, peleando los porcentajes, para seguir en el candelero, obviando el modelo y el proyecto, por la pura elocuencia huera y vana, como si repitiendo la menor intención, el buenísmo infranqueable y el esfuerzo por lograr seguir en el machito del poder, aunque solo sea entre los suyos.
Sin detenerse ni un segundo en valorar las consecuencias de sus gestiones, habiendo pasado de puntillas sobre la situación estancada de una situación de la sociedad que va a rastras de la desigualdad imperante y voraz.
Mientras cuesta tanto que los socialistas "susanistas" andaluces decidan ponerse en posición de "prevengan" a la espera de las nuevas directrices del nuevo secretario general, el electo, antes incluso de correr a "montar un Congreso Regional" que vuelva a reunir a los palmeros más cercanos todos ellos, muy dignos por cierto, muy bien colocados con sus puestos de responsabilidad zozobrando un poco.
Incluso aceptando que algunos dirigentes "muy mojados y muy sectarios" anden plateándose incluso su dimisión, por ejemplo, en el caso de Emiliano García Page.
Con la ira contenida de un Felipe González que no ha tenido mucho tiempo, ningún tiempo, en felicitar al nuevo Secretario general.
Y suma y siga el PSOE hasta la irrelevancia absoluta.
Torre del Mar mayo – 2.017