Por este motivo, la avenida Juan Sebastián Elcano, frente al colegio de San Estanislao, fue escenario ayer de una protesta vecinal por el paso de grandes camiones por esta vía urbana. «Estamos sufriendo el paso continuo de camiones de día y de noche, tanto por la Carreterita como por la avenida Juan Sebastián Elcano y la calle Carretera de Almería, y el Ayuntamiento no está haciendo nada pese a que se aprobó una moción para limitar ese tránsito», manifestó ayer a este periódico Irene García, una de las representantes de los afectados. «Se trata sobre todo de camiones que hacen el trayecto desde la Cementera de la Araña al Puerto y viceversa. Un trayecto que deben de hacer por la autovía, pero lo hacen por la ciudad atravesando las principales calles Pedregalejo y El Palo al ser más corto». Y es que mantiene que el tránsito de esos camiones, además de las molestias lógicas que produce por ruidos, supone un peligro, ya que la circulación de esos grandes vehículos se produce tanto en horas de entrada como de la salida de los colegios, congestiona el tráfico de la zona y genera otros problemas. Mercedes Pirez, presidenta de la asociación de vecinos de El Palo, asegura por su parte que se trata de una reivindicación que los vecinos de El Palo «venimos reclamando desde hace más de veinte años, pero a la que no se le acaba de poner solución por falta de voluntad política». Esta dirigente vecinal también hace alusión a la moción «que fue aprobada hace ya dos años pero que no se cumple, por eso hemos vuelto a enviar escritos al Ayuntamiento poniendo de relieve la situación, pero no hemos recibido ninguna respuesta», asegura. En esos escritos, la asociación vecinal expone que «desde hace 22 años» viene solicitando la prohibición de que los vehículos pesados circulen por las calles Almería, Juan Sebastián Elcano, Salvador Allende y calle Bolivia. Exponen igualmente que «vehículos pesados de 5 ejes y en muchos casos con más de 40 toneladas, circulan en determinados días del mes con una frecuencia de 45 minutos, coincidiendo con la entrada y salida de los niños/as del colegio». Y señalan, además, que el continuo paso de esos vehículos pesados «produce un deterioro en la calzada, que no está diseñada para el paso de ese tipo de vehículos». Argumentan que «la apertura al tráfico de la autovía en 1992 motivó que la avenida Juan Sebastián Elcano y calle Almería dejara de ser travesía para convertirse en calles y de esta forma, pasó a ser competencia municipal», por lo que consideran que «lo normal era que los vehículos pesados, excepto los urbanos y los autobuses públicos que traen los pasajeros de la Axarquía, no circularan por estas calles, que debido al tránsito de personas, proximidad de los edificios, colegios, no reúnen las características adecuadas».
«Circular por estas calles es más económico para las empresas, incluida la fábrica de cemento, que es la que más vehículos pesados aporta a dicho tráfico, pero para nosotros, y entendemos que para la administración, es más importante la seguridad y la vida de las personas», argumentan
