Pero, a la primera en la frente, Carme Chacón, la aspirante eterna a las primarias o casi, se auto retira por “motivos políticos no relevantes”, e Irene Lozano, el fichaje estrella de hace cuatro meses también hace mutis porque no puede dedicarse a sus intereses particulares y a los del servicio público. Y de paso Pedro Sánchez insiste en que el número siete en la lista de Madrid es buena pole position para Edu Madina, aunque ¿no mejoren los resultados?, y haya de volver a quedarse sin escaño.
En tanto se puede añadir una dosis de inquina y mala baba por parte de la baronesa Susana Díaz que ahora “defiende muchísimo” a Madina, el mismo candidato que no fue elegido mayoritariamente en Andalucía, con Susana al frente, en las primarias a la secretaria. En fin, rivalidades solapadas e internas, de las que va especializándose la citada baronesa andalusí.
¡QUÉ ASCO!
“La aparición de nuevos casos de corrupción del PP y la imputación de más dirigentes de ese partido por escándalos ya conocidos no está teniendo consecuencias ni internas ni externas”.
Y ellos a lo suyo, “sin saber nada, sin contestar nada”, a dejarse llevar por la corriente, con la desfachatez que debería entenderse como impresentable.
Inmunizados contra el hedor como si no existiera ni podredumbre moral, que allá nos den a todos.
Como está sucediendo en Galicia, con el presidente Feijoo que se indigna y habla de “trampa moral” cuando la oposición y la fiscalía acusan a dos consejeros de haber primado “intereses económicos” para “cuadrar” el déficit sobre la posibilidad de facilitar el medicamento indispensable y salvador a los enfermos de hepatitis C. Seis de ellos murieron antes de recibir el medicamento.
Y ¿a quién le importa?, ¿desde los responsables a los votantes del PP?, y si sí es verdad que les importa lo disimulan muy mucho.
Pero ahora el rollo anda en “cruzarse culpas”, haciéndonos creer que “volver a votar”es un trabajo ¿insuperable? de la población que ¿ha tomado nota? . . . o ¿vamos a seguir disimulando?.
Torre de Madid abril – 2.016