Aunque resultara que, al cabo y por el propio desarrollo del expediente, del caso de los ERES en Andalucía, cuando resulta que puede que los señores Chaves y Griñán “hayan podido ser llamados e imputados” para declarar bajo la sospecha de haber sido sujetos de “prevaricación y malversación” en el monumental escándalo que “se hizo verbo y carne” en las tierras gobernadas de arriba abajo, con mayorías absolutas, de los señores ex mandamases, Griñán y Chaves, a los que “todo el mundo”, de la Susana al Pedro, titulares de la Junta y del PSOE, cree “inocentísimos de todo punto”, algo lelos en cualquier caso por haberse sido burlados, ausentes de todo entendimiento, sobre la hez que crecía y se expandía como una hidra, maloliente y putrefacta, bajo sus mandatos. . .
Como para que ahora, Susana, la que “quiere tanto a las andaluzas y andaluces”, y Pedro, “el martillo contra los corruptos, presuntos o así”. . .expresen con contundencia sus “coherencias y sus compromisos”, adaptados, adecuados a qué tipo de imputación se referían, es decir, . . . “la imputación por un delito”, ¡acabáramos!, . . .aunque sean “sospechosos” para la jueza Ayala de “prevaricar y malversar”. . . aunque luego lleguen a resultar “perfectamente inocentes”, víctimas los “pobres cuitados” de las líneas rojas que habían marcado cuando presumían de “indómitos látigos contra todo abismo de corrupción en sus filas socialistas” . . .claro que entonces “igual no se estaban refiriendo a tan altos dignatarios” , o así.
Y el personal “chuleao” de nuevo, ¡qué remedio!, por la explicaciones rotundísimas de los áulicos dignatarios. . .como si fuéramos “bobos de baba”.
Ahora que nadie espera que los citados señores Griñán y Chaves se decidan, motu propio, a renunciar a sus escaños, a sus cargos, a toda relación institucional con el partido al que, digan lo que digan, se desdigan lo que se desdigan los actuales dirigentes, tanto tienen comprometido . . .
Ahora que el tema del millonario fraude ocurrido en el solar andaluz ya ha pasado a la historia ¿del olvido?. . . con unos pocos pringaos que pagarán “la propina de la cuenta”. . . ¿o que se creían?.
Torre del Mar febrero – 2.015