MIGUEL FERRARY. MÁLAGA Cómo si fuera un bar con reserva del derecho de admisión. El nuevo semáforo, que instalará la EMT junto al campo de San Ignacio, en El Palo, sólo se pondrá en verde para los autobuses de la línea 11 que vayan a girar hacia la Carretera de Olías, una maniobra prohibida hasta ahora y que únicamente se permitirá para el transporte público.
El nuevo dispositivo se incluye dentro del proyecto de la empresa de transportes para modificar el trazado de la línea 11, a la que dotará de una doble cabecera con final en Playa Virginia y la Carretera de Olías. Esta idea tiene como objetivo simplificar el actual recorrido, que se hace más directo, aunque a costa de que los autobuses irán de forma alterna a los distintos finales del trazado.
Para conseguir acceder a la Carretera de Olías, con la parada final frente a la puerta de El Candado, los autobuses realizarán un giro que hasta ahora estaba prohibido, como es maniobrar directamente desde la Carretera de Almería, a la altura del campo de fútbol de San Ignacio.
En ese punto es necesario este nuevo aparato, que es una versión más avanzada del tradicional semáforo. Un modelo que permanecerá con la luz en rojo y sólo cambiará al verde cuando se acerque un autobús de la línea 11 por el carril reservado para el giro.
El sistema es sencillo y sigue el mismo patrón que el que se está instalando en el Centro para controlar los accesos a las calles peatonales. Una cámara de vídeo preparada para reconocer las matrículas se instalará unos metros antes del semáforo. En cuanto identifique alguna de las matrículas de su base de datos, en la que se incluirán los autobuses de la EMT, se pondrá en verde para franquear el paso a estos vehículos. Al mismo tiempo, el resto de los semáforos de la zona pasarán al rojo para dar prioridad al transporte público.
Fuentes de la EMT señalaron que si un coche se coloca a la espera de que se ponga en verde el semáforo, "éste seguirá en rojo y terminará por continuar su camino, ya que esa maniobra sólo estará permitida para los autobuses".
Ésta es la primera vez que se instalará un dispositivo con cámara vinculada a un semáforo, aunque la empresa de transporte utiliza uno parecido en la calle Pez de Plata. En este caso, sin embargo, la frecuencia del verde se activa por un dispositivo que llevan los autobuses y que envía una señal para el cambio de color.
La instalación del semáforo se realizará a partir del 4 de abril, ya que está incluido en las obras del llamado ´Plan Zapatero´, financiadas con dinero estatal. El presupuesto es de 132.000 euros y estará operativo para el próximo verano.
Fuente: La Opinión de Malaga.
