Se trata de un acuerdo para que la plaza de las antiguas cocheras de la EMT, en la avenida Juan Sebastián Elcano, pase a llamarse Plaza de Manuel Díaz Millán.
En agosto del año pasado, la sección semanal Mirando Atrás de La Opinión dio a conocer el caso de este carpintero de Pedregalejo, fallecido en las antiguas cocheras del barrio en un accidente laboral del que pronto hará 40 años, porque tuvo lugar el 13 de abril de 1977.
Manuel estaba reparando el parachoques de un autobús cuando el aparcado justo detrás tuvo un fallo y empujó al de delante. El trabajador atropellado fue trasladado al hospital Carlos Haya, donde falleció. Dejaba viuda, María Victoria Soler y dos hijos, María del Mar y Juan Carlos.
Fue muy emocionante para el autor de estas líneas poder hablar con María Victoria, que confesaba que siempre que pasaba en autobús por las antiguas cocheras, «miraba para otro lado». Este ritual lo realizó durante décadas, pero en agosto dio el paso y aceptó reunirse en la plaza con antiguos compañeros de su marido, así como de la asociación Tranbus. Por suerte, comprobó aliviada que el entorno había cambiado del todo y ya no le recordaba momentos tan trágicos.
Manuel Díaz Millán había nacido en el 31 y desde los 14 años estaba ligado a lo que entonces era la Sociedad Malagueña de Tranvías, hoy, Empresa Malagueña de Transportes. Tenía 46 años cuando murió y tanto a Tranbus como a sus compañeros, les parecía de justicia que esta moderna plaza, con el antiguo tranvía del Morlaco, el gimnasio de la ACB y el edificio de las antiguas oficinas de las cocheras, obra de Guerrero Strachan -salvadas de la demolición por el empeño de la asociación de vecinos de Pedregalejo- mantuviera todavía más el recuerdo de las veteranas cocheras de tranvías y luego autobuses con el nombre de este trabajador fallecido en ellas.
Hay que felicitar a los grupos políticos por haber tenido la sensibilidad de homenajear a este carpintero, formado en el ICET del Palo y a que a su vez era hijo de un trabajador de las cocheras, que dejó un recuerdo tan bueno entre su familia y compañeros.
La iniciativa tuvo el respaldo más tempranero en el gerente de la EMT, Miguel Ruiz y el concejal de Málaga Este, Julio Andrade, que vieron lógica y de justicia la iniciativa.
Tanto José Ramón Rodríguez, presidente de Tranbus como los compañeros de Miguel Díaz Millán, Francisco Jurado y Francisco Peralta, además de la familia del carpintero, ya contaron en agosto a La Opinión que sería un bonito detalle que el próximo 13 de abril, Jueves Santo, cuando se cumplan 40 años del accidente mortal, se inaugurara la Plaza de Manuel Díaz Millán . Suerte