Votar por la Sanidad Pública

Se acercan las elecciones y como desgraciadamente era de esperar la Sanidad no esta ocupando un lugar importante, mas bien ninguno, en la campaña electoral, muy entretenida en las mentiras y exageraciones del trifachito y en los debates (si sí, si no, o todo lo contrario), mientras tanto el juicio que parecía iba a ser una estrella mediática se ha quedado casi oculto por el aburrimiento burocrático del procedimiento judicial, y las andanzas y espionajes de Villarejo solo han merecido una pequeña atención de la opinión publicada.

Se veía venir esta marginación de la Sanidad en la campaña electoral y ello pese a que es una de las grandes preocupaciones de la ciudadanía, según dicen las encuestas, y evidentemente tiene una gran importancia, a veces es determinante, en la vida de las personas, ya que se trata de un servicio publico básico que todo el mundo utiliza y/o necesita a lo largo de toda su vida, a veces sin ser consciente de ello (por ejemplo el control de las enfermedades infectocontagiosas, mediante vacunas, tratamientos, etc es una de las garantías de nuestra salud), además de servirnos como una red de seguridad en el caso de enfermar, porque tampoco solemos darnos cuenta de que el sistema sanitario público nos garantiza una atención de calidad, a todas las personas, de cualquier enfermedad, cualquiera que sea su coste y en cualquier punto de nuestra geografía.

Que estamos ante un sistema que expresa la solidaridad de las personas con más salud y más recursos con quienes están mas enfermas y son mas pobres, y que por eso tiene tan gran aprecio y reconocimiento internacional. Por supuesto este es el primer motivo para votar por la Sanidad Pública, porque tenemos un buen sistema sanitario que hay que preservar y defender, y que en ello nos va nuestra salud y puede que nuestra vida.

Tenemos un buen sistema sanitario que hay que preservar y defender El segundo motivo es que hemos vivido un proceso de recortes, deterioro, desmantelamiento y privatización de la Sanidad Pública protagonizado por el PP y sus aliados que intencionadamente la ha empeorado para favorecer los negocios privados (en los últimos años el seguro que mas ha crecido es el sanitario, que tiene ya mas de 11,5 millones de afiliados), porque cuando las cosas funcionan mal o las listas de espera se prolongan, muchas personas se buscan la vida ( si tienen recursos económicos) en el sector privado, aunque habitualmente si tienen un problema grave de salud tengan que volver a la Sanidad Pública para resolverlo.

El tercero es porque la Sanidad Pública necesita recursos suficientes para poder recobrarse de los recortes y para ello es preciso tener fondos públicos adecuados y para ello se precisa recaudar impuestos. Quienes prometen rebajas de impuestos (que además suelen ir dirigidos a los que mas tienen) están haciendo insostenibles unos buenos servicios públicos entre ellos la Sanidad (recuérdese que las CCAA dedican a Sanidad alrededor del 40% de sus presupuestos), por eso no hay que votarles porque lo que están diciendo, sin expresarlo claramente, es queremos peor Sanidad Pública, mas recortes, mas copagos, mas exclusiones, mas desigualdad.

El cuarto tiene que ver con la política privatizadora que se ha llevado a cabo en nuestro país y que lejos de contener los costes como se vendía los ha incrementado notablemente (5-7-8 veces mas) sin mejorar la asistencia y deteriorando aun mas a los centros públicos. Por eso hay que exigir el acabar con las privatizaciones y recuperar lo privatizado, como se ha hecho en Alzira, y se promete en Denia, porque es factible y solo depende de la voluntad política de los gobiernos.

El quinto porque necesitamos pararle los pies a la industria farmacéutica, que no contenta con tener grandes beneficios quiere hacerlos cada vez mayores, a costa de los presupuestos públicos y de la exclusión (1,4 millones de personas no retiran los medicamentos prescritos por problemas económicos). Necesitamos una política farmacéutica que controle y racionalice el gasto y que anteponga los derechos de la población a los beneficios de las multinacionales. Y ya sabemos lo que quiere el tripartito, favorecer los intereses de la industria y ponerles las menores trabas posibles (por ejemplo acaban de anular las subastas de medicamentos en Andalucía, o lo que es lo mismo dejan de ahorrarse 200 millones € en farmacia).

Digamos que esos son los principales motivos para votar por la Sanidad Pública y no hacerlo por el tripartito neoliberal de ultraderecha, que está por el recorte y la privatización, y lo ha demostrado allí donde gobierna o ha gobernado, aunque lo haga a la chita callando y no como Vox que (sin complejos) anuncia con claridad que esta por la privada. ¿Cómo es que no aparece en las primeras paginas de los periódicos o de las televisiones? Pero obviamente hay muchos mas, y no son los menores que tenemos que reivindicar nuestro derecho a que no nos impongan ideologías conservadoras y confesionales en nuestra vida y en nuestra muerte, y porque queremos que las mujeres puedan decidir si quieren o no abortar, y los enfermos terminales si desean seguir sufriendo o dejar de hacerlo, porque nadie obliga a ejercer un derecho que debe ser individual y garantizado por la Sanidad Pública (si Abascal y Casado quieren morir entre horribles sufrimientos, allá ellos, a los demás que nos dejen en paz).

Si las cosas están tan claras ¿Cómo es que no aparece en las primeras paginas de los periódicos o de las televisiones?. Obviamente hay muchos motivos, uno de ellos es que los otros partidos no lo han sabido/querido poner en primera línea del debate público y de sus propuestas (generalmente piensan que la Sanidad les quita votos, no se los da), otro son los intereses de los propietarios de los medios (en muchos casos lo son también de empresas relacionadas con el aseguramiento y/o la provisión privada), otra la presión de los anunciantes o los grandes sistemas de propaganda de las empresas farmacéuticas, tecnológicas, aseguradoras, etc, y también, por supuesto, una población que parece dar por hecho que tenemos un buen sistema sanitario y que nadie se va a arriesgar a destruirlo.

Tenemos que ser conscientes que votando por la Sanidad Pública defendemos los intereses del 99% de la población frente al 1% que se lucra de su deterioro y desmantelamiento, ahora es el momento, hay que votar y hacerlo por la Sanidad Publica, por nosotros mismos y por todos. Tu salud, la mía, la de todos, esta en juego, no podemos fallar